Actualización 22-mar-2016
Cuenta la crónica Ovetense de
la Conquista atribuida a Jaimes de Sotomayor, según la redacción del
capitán Alonso de Xerez Cardona de 4 de marzo de 1639, sobre los usos y
costumbres de los aborígenes canarios: «... Ayudábanse unos a otros a
senbrar, que en acabando uno auían de ayudar luego a su vezino hasta que
acabase; araban con unos garabatos y senbraban sebada y la cojían y guardaban
en vnos silos para su año.»
Más detalles daban las crónicas de Pedro
Gómez de Escudero (1629-1695), quien decía sobre la misma materia: «Ayudabame unos a otros en sus sementeras,
las tierras eran consejiles que eran suyas mientras duraba el fruto, cada año
se repartian, tenían pósitos onde encerraban cebada y cosa de comer, y era de
los frutos como diezmo que daban en aquel depósito para los años faltos y hacer
repartimientos de limosnas. Tenian silos en los riscos y se conservaba
el grano muchos años sin dañarse, lo cual ahora no puede conseguirse
ni que le pique el gorgojo».
Detalle de los silos del Cenobio de Valerón |
El Cenobio de Valerón, es uno
de esos silos al que en principio se le confundió con lugar de harimaguadas,
por lo que se asociaba al conventual "cenobio" y al
antro-topónimo del propietario de las tierras. También hay muchos en las islas
asociados a sus cuevas trogloditas de habitación, y en muchos casos le llamaron
los castellanos "cuevas de canarios" o figuradamente "palomares".
Por último, habían otros que los
conquistadores tenían muy claro que eran graneros donde los canarios guardaban
el grano o los frutos secos, y a estos llamaron "silos".
Unos están perdidos como Lomo de los Silos, asociados al poblado de Guanchía en
Teror y en la Vega de San Mateo, pero hay dos topónimos que aún desapareciendo
los vestigios han perdurado en la historia, pues allí también llegaron a
nuestros días los asentamientos poblaciones.
Los silos eran como muchas "hornacinas" que
construían horadando la roca, para almacenar en ellos el producto de la
cosecha, normalmente orientados de naciente-poniente, o al contrario, para que
gozaran de mayor exposición al horario solar.
GÁLDAR
Topónimo con el que se conoce un caserío
situado junto a la carretera San Isidro-Juncalillo (GC-220),
que recibe su nombre por la antigua existencia de silos de
factura aborigen, de los que quedan pocos vestigios en los solapones donde se
localizaban.
«En donde llaman Los Silos hay unas amplias oquedades que los aborígenes utilizaban para guardar sus granos; de ahí el nombre del lugar. En estas cuevas se recogieron, hace una docena de años, objetos diversos, entre ellos unas figurillas de animales, ignorándose actualmente su paradero» (JIMÉNEZ SÁNCHEZ, S.: Excavaciones arqueológicas en Gran Canaria. 1942, 1943 y 1944, Madrid, 1946).
«En donde llaman Los Silos hay unas amplias oquedades que los aborígenes utilizaban para guardar sus granos; de ahí el nombre del lugar. En estas cuevas se recogieron, hace una docena de años, objetos diversos, entre ellos unas figurillas de animales, ignorándose actualmente su paradero» (JIMÉNEZ SÁNCHEZ, S.: Excavaciones arqueológicas en Gran Canaria. 1942, 1943 y 1944, Madrid, 1946).
Hay una clara referencia documental a este
caserío, pues se menciona su proximidad a la Hoya de Pineda al
dar nombre a la ladera donde se encuentra. Es en el testamento de la mujer del
Capitán Esteban Cabrejas Bethencourt, Agustina Botello Tello, quien el
día 27 de julio de 1750, dice tener setenta y siete fanegas y diez celemines de
un «Cortijo denominado lomo de Pineda, en los Silos».
Vista (Google Earth) |
Detalle del lomo de los silos (Google Earth) |
Muy cerca y confundiéndose con el caserío de los Silos se encuentra otro caserío más moderno llamado Buenavista, que recibe su nombre por su situación en el lomo del
mismo nombre, que ofrece una gran panorámica de toda la Vega de Gáldar.
Localización en Gáldar (Espacios Naturales de Gran Canaria) |
SANTA BRÍGIDA
Topónimo con el que se conoce un caserío
situado junto a la carretera Santa Brígida-Lomo Carbonero (GC-151) y
en la margen del barranco de Alonso.
El lugar fue un referente geográfico
importante en la antigüedad, donde los «caminos de los canarios», como
eran llamados los de factura anterior a la conquista, fueron reconvertidos en
caminos Reales.
Estanque (Fedac) |
En las Ordenanzas del Concejo de 1531
cuando regulan «la guarda de las sementeras y vegas sembradas» y
en concreto el deambular con puercos por los caminos, mencionan el lugar cuando
dicen:
«Otrosy que los puercos no puedan andar en
todo la defendido de estos mojones que aquí yrán declarados los quales vayan el
primero desde una albarrada vieja que está encima de la Vegueta que dizen de
Porras que Iinda con tierras de Castillo y de ay atravesar el barranco del agua
a dar al lomo de las tierras de Caçorla y todo el lomo baxo del Gamonal a dar a
unas cuevas de ganado de la de Juan de Sanlúcar e de ay el lomo abaxo a dar a
los sylos al Lentiscal y de ay el camino que va a dar al yngenio del
licenciado de la Coba y…».
Cantonera (Fedac) |
En la data que solicita al Cabildo General
el personero de la isla Alvaro de la Mata el 23 de marzo de
1540, da muchas referencias de los beneficiados con tierras en estos lugares y
de sus aprovechamientos cuando dice:
«... que el a conprado de los Riberoles
que resyden en Sevilla y en Genova çierta hazienda y en ella estan un sitio de
yngenio e un molino e un parral e quinze fanegas de tierras de sequero donde
dizaen el yngenio viejo que es en este barranco linderos el dicho barranco e
tierras que fueron de Denis Afonso que agora son de Juan Marin y los Riscos y
la questa que fue de Pedro Martin y asymismo conpro otro pedaço de tierra
de riego para cañas en Taçautejo que esta a la mano yzquierda del camino
que va de esta çibdad a samta Virgeda que son dos suertes linderos al
dicho can (sic) e
por el cabo de arriba tierras de Juan de Ariniz escrivano mayor del cabildo y
el barranquillo que dizen de Alonso de Troya e tierras que fueron de maestre
Juan e son agora de Diego Diaz e ootro (sic) pedaço de tierra
en el Llano de Taçautejo a man derecha del dicho cam linderos tierras de los
herederos de Juan de Herrera e el camino que biene del yngenio de Diego Diaz a
los Silos e tierras del dicho dotor e del cabo de arriba el açequia e
el tiene y posee y a labrado en ellas como cosa suya ... » (RONQUILLO,
M. Y AZNAR VALLEJO, E.: Repartimientos de Gran Canaria, Las Palmas
de GC, 1998).
Caprichos volcánicos (Google Earth) |
Otros dos repartimientos ocho años después
nos aportan más detalles del lugar. Una del 13 de agosto de 1548, por
manifestación que hacen los hijos del fallecido Bartolome Sanchez
Chillon, Alonso Sanchez y Anton Sanchez Chillon, cuando dicen «...
a nuestra notiçia es venido que por parte de Hernando Diaz de Moron se an
pedido çiertas tierras junto al monte del Lantiscal e hasta alindar con tierras
de Alonso de Troya e con tierra del dicho nuestro padre e por que el dicho
nuestro padre tovo e a nos pertenesçe agora parte de la dichas tierras hasta en
contia de veynte hanegadas que son desde un camino del Gamonal por un
lomo abaxo desçiende a la cabeçada del barranquillo que esta arriba de
los Silos ençima de los mojones del Lantiscal do esta una palma seca e
de ally a dar a las tierras de Montesinos que conpro de Cristobal Suarez e linde
por otra parte con tierras de Alonso Troya e de ally hasta dar a las paredes de
tierras que fueron de nuestro padre ...».
Y la del carpintero Diego de Pineda, del
19 de diciembre del mismo año 1548, pidiendo «... me hagan merçed de un
pedaço de tierras que son de las cabeçadas del Lantiscal que lindan con los
barranquillos de las tierras de Miguel Martyn y por la banda de arriba con
tierras del dicho Miguel Martyn y de la otra vanda de azya a los Sylos tierras
que dizen de Hernando Diaz de Moron y por la vanda de abaxo el Lantyscal con
aguas bertientes a los Riscos donde esta el majano sobre el Risco
Frontero de los Sylos ...».
En el risco del lomo junto al barranco, de
los silos prehispánicos no queda vestigio alguno, quizás debido a la reutilización de las
cuevas para otros fines o por los desprendimientos, que nos han dejado al
descubierto aflorando los caprichos de la naturaleza volcánica.
Siglos después el topónimo aparece
consolidado en documentos como el testamento del matrimonio de Juan Hernández
de Quintana y Juana Suárez realizado el 31 de agosto de 1765, quienes incluyen
entre sus bienes una fanega de un «Cercado de tierra en los Silos de La
Vega».
Localización en Santa Brígida (Espacios Naturales de Gran Canaria) |
¿Estas seguro que los Silos son de Sta. Brígida y no de Santa María de Guía?
ResponderEliminarEl "Cenobio de Valerón", tal cual se inventaría el topónimo, están en Santa María de Guía, y lo que se dice en el texto es que son los "silos" aborígenes por antonomasia. Cuando comento el topónimo "Los Silos", tal cual se inventarían por el IDE Gran Canaria y así aparece en la cartografía del Instituto Geográfico Nacional, en esta isla encontramos dos con mucha significación que son por orden alfabético los de Gáldar y Santa Brígida, y también hay otros en Artenara, Tejeda y la Vega de San Mateo en singular, y, en Teror y Valleseco en plural. Los silos del "Cenobio de Valerón" tienen una entrada individual por su gran importancia y tamaño. En la isla existen otros silos aborígenes pero no han perdurado como topónimo. Gracias por plantear la duda interpretativa y dar lugar a mi aclaración.
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