martes, 29 de mayo de 2012

FERNANDO, SAN (MOYA)

Topónimo al pago situado en la carretera de Moya a Fontanales (GC-075) , que fue conocido como San Fernando de Fontanales, responde al agradecimiento al rey Fernando VII por parte del militar nacido en el Carrizal de Ingenio, el Mariscal de Campo Francisco Tomás Morales, último Capitán General de España en Venezuela, que también ostentó el mismo cargo en el Archipiélago y bautizó su hacienda con el nombre del Rey.

Mariscal de Campo Francisco Tomás Morales
Hijo de los canarios Francisco Miguel Morales y María Alonso Guédez, nacido en el Carrizal sobre 1781, llegó a Venezuela el 19 de marzo de 1804, estableciéndose en Píritu (Anzoátegui), donde trabajó como pulpero. Cinco años después contrajo nupcias en Barcelona con Josefa Bermúdez.

En 1813, se unió a José Tomás Boves, convirtiéndose en poco tiempo en su segundo al mando, en la lucha contra las tropas de Simón Bolívar.

El 12 de octubre de 1814 atacó al general de división José Félix Ribas, quien con mil quinientos hombres se había organizado la defensa de La Victoria, que impedía el paso hacia Caracas de las fuerzas realistas.

El 7 de noviembre de 1821 fue ascendido a Mariscal de Campo y el 7 de junio de 1822 derrotó de por segunda vez al general Carlos Soublette en el combate de Dabajuro (Venezuela). El 4 de julio del mismo año fue investido con el cargo de Capitán General de Venezuela, encargándose del mando de las fuerzas realistas en Venezuela.

Tan pronto asumió el mando, reinició operaciones destinadas a recuperar el territorio perdido por el ejército español y a tratar de restablecer la autoridad del Rey de España.

El buen aroma del eucalipto blanco (caminosdecanarias-blogspot)
Perdió distintas batallas contra los independistas bolivarianos y en 1823, después de la derrota de la escuadra española en el Lago de Maracaibo, Morales capituló ante el general de brigada Manuel Manrique y se marchó a Cuba, desde donde prosiguió hacia España.

En 1827 fue nombrado comandante general de las Islas Canarias y presidente de la Real Audiencia. En 1834 regresó a la Península, donde permaneció en cuartel hasta que volvió a Canarias en 1837, ya retirado de la vida pública.

Horno de pan (Fedac)

El Rey le concedió una data de novecientas fanegas como pago por sus servicios a la Corona. Con su capitulación, el Mariscal Morales se convirtió oficialmente en la última autoridad de gobierno al servicio de la corona española en Venezuela. Su yerno, el Brigadier Ruperto Delgado, denominó con el nombre de la reina consorte y posteriormente regente, María Cristina, su hacienda de Santa Cristina, en el municipio de Guía, siguiendo la estela de su suegro.

La concesión de la data al Mariscal Morales fue un punto de inflexión en la ocupación de la Montaña de Doramas, iniciándose a partir de la misma una progresivo avance de la roturación de las tierras para su puesta en cultivo por constituir un precedente en la desprotección del medio.

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

lunes, 28 de mayo de 2012

FERIA, PLAZA DE LA (LAS PALMAS DE GC)

Topónimo urbano con el que se sigue conociendo popularmente la plaza que actualmente lleva el nombre del Ingeniero León y Castillo.

Según algunas fuentes, recibió este nombre porque hasta el siglo XIX era el lugar por «fuera de la Portada» donde se realizaba la «feria del pescado» para subasta y venta del mismo, época en la que el atraque era en el desaparecido Muelle de San Telmo, pues allí estuvo el castillo de San Telmo, en la prolongación de la calle de Bravo Murillo, donde se asentaba la Muralla de Las Palmas.

Monumento a Galdós (fotografiasdeesculturas-blogspot)
Según el DRAE, en el significado de la palabra Feria la primera acepción es «Mercado de mayor importancia que el común, en paraje público y días señalados». En muchas ciudades españolas se mantiene el topónimo urbano de la calle de la Feria. Por ejemplo en Sevilla, cuya cultura y costumbrismo en siglos pasados tuvo mucha importancia en la Ciudad, existe aún la calle La Feria, donde se viene realizando todos los jueves desde el siglo XIII un mercado en la calle, por lo que recibe tal nombre.

Calle La Feria de Sevilla (elpasadodesevilla-blogspot)
El antiguo barrio de Arenales que se iniciaba por el Sur en la Muralla de la Ciudad, lo que se conocía como "fuera de la Portada", suelo de propiedad municipal, inició su urbanización en la segunda mitad del siglo XIX, y en 1860 estaban a punto de concluirse la construcción de unas cincuenta casas y «todos los sitios de las calles principales» estaban ya solicitados al municipio con la condición de que deberían edificarse inmediatamente.

Pilar de Venegas junto a La Feria (1914 Kurt Herrmann - Fedac)
Se consideró como una urbanización marginal, de arrabal, y «la edificación que allí se hizo fue la más humilde y modesta: la característica casa terrera, la casa cúbica carente de todo lo que fuese la más mínima estética y muchas veces sin el encalado y el albeo que ofreciera una presentación decente» (HERRERA PIQUÉ, A.: La ciudad de Las Palmas. Noticia histórica de su urbanización, Las Palmas de GC, 1978).

Pero el topónimo de "plaza de la feria" comienza a consolidarse es cuando, bajo el segundo año del mandato del alcalde Antonio López Botas en 1862, tiene lugar en la misma Exposición Provincial de Arte, Agricultura e Industria, a celebrar en Las Palmas los días 28, 29 y 30 de Abril de 1.862. Es organizada por la Sociedad Literaria, Artística, de Fomento y Recreo, conocida popularmente por Gabinete Literario, presidida por Juan de León y Castillo, y está concebida en homenaje a la reina Isabel II, en conmemoración de la Incorporación de la Isla a la Corona de Castilla, y para la que se había invitado a todos los pueblos de la siete islas por su carácter provincial, y para contribuir a la misma se organizó una suscripción popular. El programa oficial difundido por el periódico El Ómnibus el 16 de abril de 1862, contenía para el día 28 de abril el siguiente acto:

Antonio López Botas
con su mujer e hija (Fedac)
«A las 7 se abrirá la feria en la plaza Nueva de los Arenales de Santa Catalina, concurriendo el M.I. Ayuntamiento de esta ciudad á inaugurar el acto y á acordar el nombre que en lo sucesivo deberá tener la misma plaza: asistirá igualmente á solemnizar lo uno y lo otro una de las bandas de música de esta Ciudad. 

La feria, que continuará por todo el dia hasta la noche, comprenderá toda clase de animales, frutos y productos de Agricultura, Industria, Artes y Comercio del pais principalmente, sin que por esto se prohiba, ni esquive, la concurrencia de artículos estrangeros. 

En la misma plaza de la feria se armarán una o más tiendas de campaña para café y fonda; juegos de cucaña, columpios, trapecios y un estenso trabladillo para báile público; cuyos juegos y diversiones tendrán lugar por la tarde.» 

Desconocemos si intencionado o no, pero en el inicio del tercer párrafo reproducido ya se postulaba su denominación “plaza de la feria”.

Es así como en el plano de López Echegarreta de 1883 ya aparece un terreno sin construir al que llama Plaza de la Feria, que siguiendo la pauta de otras ciudades españolas es donde se ubica frecuentemente un mercado al aire libre, al estilo de los "mercadillos" actuales, trasladados al siglo XIX donde en los arrabales de la Ciudad se establecían los puestos para la venta de verdura y de frutas, y, se expendía el pescado y los productos de la industria chacinera que competía con los puesteros del Mercado de Vegueta donde acudían los sirvientes de la población más pudiente de Vegueta y Triana.
Juan de León y Castillo 
(Ojeda Pérez  - Fedac)


Según cuenta Sebastián Hernández Gutiérrez en la biografía Juan de León y Castillo, este ingeniero redactó un gigantesco proyecto para su Cárcel de Las Palmas apoyándose en los postulados de la filosofía de Jeremy Bentham (1748-1832), famoso legislador y pensador, en la búsqueda de una solución humanitaria para reprimir a los antisociales, que se construiría en este amplio solar.

Fue tal su entusiasmo que además no se resistió a mejorar el sistema benthamiano aportándole su particular perspectiva de ver las cosas de este mundo terrenal como proyección del otro espiritual. Después del intento fallido protagonizado por Oraá para dotar de una cárcel moderna a la Ciudad, la sociedad grancanaria reaccionó de forma unánime al reiterar una petición en la fórmula de una Cárcel para la Audiencia de la Provincia. Así consta en la resolución de 15 de junio de 1860 por la que Madrid autoriza la redacción del proyecto de la institución penitenciaria denominado «Depósito municipal. Cárcel de Audiencia y Presidio correccional».


Con esta propuesta de pomposo nombre, el problema inicial suscitado en la mente del ingeniero Juan de León y Castillo fue la elección del modelo a desarrollar, entablando su propio dilema entre la encarcelación en común, o la encarcelación individual. Optó por el individualismo porque era el sistema carcelario más avanzado y progresista de su tiempo. En sus referencias están las cárceles de Aubum o de Filadelfia. De acuerdo con la legislación en la materia, inventarió la población reclusa en ciento setenta y nueve reclusos, y estimó un crecimiento nulo al creer que descendería, persuadida por la nueva cárcel.

Cárcel de Filadelfia de J. Haviland (letralia-com)
Proyectó un edificio gigantesco para la época, que por sus dimensiones no podía ser incluido en el contexto de la trama urbana del momento. Tampoco había en los barrios de Vegueta y Triana un solar de este tamaño, y las condiciones de seguridad le obligaban a buscar un lugar fuera de la Portada, eligiendo este terreno que en 1864 era tan solo el extremo Norte del barrio de Arenales y que no tenía ni nombre.

La planta del edificio proyectado era, según lo acostumbrado, un cuadrado que recogía una distribución radial, de tres radios que concluían en el cuerpo de inspección, un cuerpo circular situado en el centro geométrico del solar. La variable al sistema estaba en la crujía perpendicular al cuerpo circular que servía de parapeto-fortaleza para mostrarse al exterior como la fachada monolítica del conjunto. Era de tres plantas e incluía distintas áreas de servicios novedosos: inspección central, encarcelación, culto y enseñanza, paseos, visitas, talleres, administración y asistencia judicial.

La Comandancia de Marina en obras 1900 (Fedac)
Constituía una novedad en favor de la modernización del uso carcelario en el que no solo la celda por sexo era una innovación, sino la inclusión de talleres o zonas de visita y paseos para el disfrute del recluso.

Estos conceptos llamaron la atención en su día a la Junta que comisionaba la construcción de la cárcel, quedando hoy como el sencillo reflejo de un modo de proyectar que se relaciona con la obra de este ingeniero. Planificaba hasta el impacto estético de la obra en medio de la trama, cosa nada común en los constructores de la época que veían su obra como un hecho aislado no ligado a los valores del urbanismo. Al final, no se le adjudicó el proyecto, según parece, por razones económicas.

La plaza y la fábrica de la luz (Jordao da luz Perestrello 1910 - Fedac)
En 1866 en el lugar es edificada la Comandancia de Marina de estilo neoclásico, con planos de Laureano Arroyo, sobre terrenos que se ganaron al mar.

Años más tarde, lo que sí prosperó fue la «fábrica de la luz», la Sociedad de Electricidad de Las Palmas, auspiciada por el abogado teldense Eusebio Navarro Ruiz, que fuera secretario de Fernando León y Castillo, hermano del ingeniero, cuando fue destituido este último de su cargo de Ministro de Ultramar y repuesto una vez más en su cargo de Embajador, pero ya residente en Francia.

La fábrica de la luz (Jordao da Luz Perestrello 1905 - Fedac)
Después de unos cuantos años en París, en los que conoció al nuevo Embajador que sustituyó a León y Castillo, Eusebio Navarro, cansado de la política, se volvió a Las Palmas y fijó su domicilio en una casa de la ya llamada Plaza de la Feria, entonces polvorienta y sin vegetación. 

Ya residente en la Ciudad, valiéndose de su amistad con Daniel Carballo Prat, Conde de Pradera, le presentó, para su financiación, la iniciativa de la «fábrica de la luz» que sacaba a concurso el Ayuntamiento. Se vino a Las Palmas con el técnico belga Clement Dantini para hacerlo director de la fábrica, de prosperar la iniciativa.

La Pepa a su paso por la Plaza de la Feria (1941 Fedac)
El 10 de junio de 1899 se inauguraba por el alcalde de la ciudad, Fernando Delgado Morales, que, según cuentan las crónicas, hizo un impulso tan fuerte al entonar en latín el fiat lux! (aproximadamente ¡hágase la luz!’), que rompió la palanca de encendido quedándose con ella en la mano, lo que costó un retraso de dos horas.

Plaza  de la Feria en 1925 (Teodoro Maisch - Fedac)
En 1915 se construyó la actual Delegación del Gobierno, y en 1932 se fusionaron, para constituir la Unión Eléctrica de Canarias (UNELCO), los dos competidores de «la luz» que se construyó en Las Canteras, donde llaman la Cicer, desmontándose la primera fábrica de la luz de la Plaza de la Feria.

Localización (Google earth)


FELIPE, SAN (SANTA MARÍA DE GUÍA)

Topónimo correspondiente a un barrio situado en el extremo occidental de la Costa de Lairaga. El ilustrado Viera y Clavijo en su obra Noticias de la Historia de Canarias (Sta Cruz de Tenerife, 1982) menciona la existencia de la ermita de San Felipe Neri en la Costa de Lairaga, situada en la hacienda de Felipe Sosa Navarro, de donde debe concluirse que es una hagio-topónimo de la advocación a dicho santo.

Panorámica (rosagrancan-blogspot)
Así lo dice Felipe Sosa Navarro, capitán, cuando en la constitución de su patronato el 4 de mayo de 1677 conjuntamente con sus hermanas recomienda a los poseedores el cuidado de la ermita que junto al camino real que lleva a Guía, «… emos fabricado nuevamente de nuestro propio caudal... a la advocassion del glorioso San Felipe Nery y ponemos en ella el santo de la misma advocación hecho de bulto y obra descultura, y tenemos reparada la dicha hermita del ornamento necesario para la selebrassion del culto diuino...».

El sustrato del drenaje en la confluencia de los barranquillos de Calabozo y de Valerón conformó un espacio agrícolamente rico. El uso de tierras para viña, pero sobre todo para otros frutos de labradío, se acredita documentalmente en la escritura de fundación del mencionado patronato cuando en la descripción de las propiedades vinculadas menciona además de las casas, bodegas y lagar, y dice que dicha hacienda contaba con un pedazo de viña de unas seis fanegas más o menos frente a unas cuarenta fanegas de labradío, entre otros bienes. Decían también que su hacienda de tierra labradía y viña tenía también cocina, pajar y gañanías, y la mitad del agua del barranco de Moya.

Casona, alpendres y bancales (Fedac)
Muy pronto comienzan a cultivarse los plátanos en esta franja costera, donde ya en 1662 el capitán Cristóbal de Bethencourt y Franquis, gran hacendado y vecino de Guía, dice poseer casas sobradadas en la Villa que sirve de «cilla». En la costa de Lairaga, donde detentaba «… cuatro cercados de tierra y trece días y medio de agua, tenía residencias altas y bajas de su morada con cocina y aposento bajo, además de casa para los plátanos…», según comenta la fuente consultada.

También por este lugar María Aguilar, viuda de Juan Palacio Cachupín, al otorgar la escritura de su testamento el 10 de septiembre de 1679, declara tener una hacienda de tierra labradía de veinticuatro fanegas y «arrifes» con catorce días y sus noches de agua del barranquillo de Valerón, en la Costa de Lairaga junto a la Cuesta de Silva.

Pozo, lavadero y aljibe (Fedac)
En el siglo siguiente, el Familiar del Santo Oficio de la Inquisición Diego Ruiz Vergara, que se casó dos veces, con Josefa Saz y Rosalía Navarro, y no tuvo hijos, en su testamento de 20 de julio de 1774, decía poseer doce fanegas de una «Hacienda de tierra labradía y “arrifes” en la costa de Lairaga, al pie de la Cuesta de Silva, quince días de agua cada mes que discurre por el barranco de San Felipe y dos días de agua de doce horas de reloj cada uno del Heredamiento del Palmital».

Su playa, llamada popularmente de Vagabundo, más al poniente de la desembocadura del barranco de San Felipe, o de Calabozo y de Valerón agua arriba antes de su confluencia, al pie de los acantilados que llaman los mármoles de San Felipe, aunque bastante peligrosa por sus corrientes marinas y la fuerza del mar en este lugar, es uno de los mayores atractivos para los deportes de relativo riesgo: son asiduos los desafiantes practicantes del surf y los que saltan en parapente desde los encrespados acantilados.

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

FATAGA, CASERÍO Y BARRANCO DE (SAN BARTOLOMÉ DE TIRAJANA)

Topónimo aborigen. En la época prehispánica fue una agrupación poblacional vinculada a la explotación de los recursos del barranco del mismo nombre y la rampa de Amurga. La base de su economía es la actividad agropastoril, con un importante núcleo agrícola en las proximidades de Maspalomas y asentamientos agropastoriles en Amurga.

Panorámica (David Jesús Sánchez - CGC)
Hay una referencia de Abreu y Galindo Historia de la conquista de las siete islas de Canaria, Sta, Cruz de Tenerife, 1977) que dice: «… Después de Ajodar marcharon sobre Fataga. Fueron a un lugar que es de las sierras, que se llama Fataga, donde los canarios decían que ningún cristiano podía llegar y allí se entró por la fuerza...».
 
Panorámica del barranco (Alby Rguez - CGC)

La clasificación del barranco homónimo como Paisaje Protegido incluye parte del mismo, de gran belleza paisajística, cuyo cauce, a veces encajado hasta conformar un auténtico cañón, discurre a lo largo de dieciséis kilómetros desde su cabecera, que ha sido arrebatada por el mayor poder erosivo de la cuenca de Tirajana, hasta su desembocadura en el delta de Maspalomas

El barranco alberga un hermoso palmeral en su fondo, plantas endémicas refugiadas en los riscos y paredones e importantes restos aborígenes entre los que destacan la necrópolis tumular de Arteara  y el pintoresco caserío de Fataga.

Palmeral del barranco (Doramas)
Aunque las canteras existentes en su límite meridional causan un fuerte impacto, a medida que se asciende hacia el interior entre arriscados espacios, es posible contemplar uno de los paisajes más sobrecogedores de la isla. Tabaibales y cardonales de las zonas bajas dan paso a hermosos palmerales. Incluso algunos pinos se cuelgan de las verticales paredes, o el escaso drago, mientras que a lo largo del cauce la presencia de agua favorece la existencia de un denso cañaveral.

Acueducto (Patrimonio Gran Canaria)
Dice Telesforo Bravo (Geografía de Canarias, Sta. Cruz de Tenerife, 1964) que la cuenca del barranco de Fataga fue prácticamente capturada en su cabecera por la Caldera de Tirajana en su continuo avanzar, hasta el extremo de que la cabecera desagua por ambos.

Molino de los Cazorla (Estodotuyo-com)
La importancia de las aguas del barranco de Fataga, muy continuo, fue motivo de pleitos de los vecinos de los distintos pagos, que acudieron a la Audiencia hasta que la ratificación de la Data Real a favor del Licenciado Pérez Villanueva agotó legalmente las reclamaciones de los vecinos.

Yacimiento Morro de la Palmita (Patrinet)

Después de la venta de los bienes a Francisco Amoreto Manrique, Capitán, Regidor Perpetuo y Familiar del Santo Oficio, este consolida en su Mayorazgo fundado el 17 de marzo de 1669, al que los distintos sucesores, a finales de dicho año y en 1698, 1732, 1733 y 1785, realizaron agregaciones de bienes y del título Conde de Vega Grande de Guadalupe, la propiedad de las mismas para el riego de Maspalomas:

«Toda el agua que descurre por el Barranco de Fataga, parajes de “Macho Gorrín” y “Ortigones” con las charcas y manantiales que se forman y nacen desde Artedara y Gitagana. La gruesa de esta agua forma un total de treinta días con sus noches».

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

FARO, EL (TEROR)

Topónimo que corresponde a un caserío situado en la zona del naciente del municipio y según el cronista Vicente Hernández Jiménez (Teror: historias, semblanzas, apuntes, Las Palmas de GC, 1991), dicha denominación es de uso relativamente reciente y no se conoce exactamente su origen.

Camino de las Dos Vegas (Patrinet)
Es el punto más elevado del antiguo camino en el que se encuentra, a 843 metros de altitud, y aunque hay otros pequeños promontorios elevados, pudiera ser que este punto sirviera de «guía» de los caminantes, y posiblemente de ahí proceda el topónimo.

En cuanto al significado del nombre del antiguo camino de herradura, la expresión de las Dos Vegas hace referencia a la Vega de Arriba y de Abajo antes de la segregación de San Mateo de Santa Brígica.Está ubicado en un enclave o cruce de caminos entre Teror, Santa Brígida y el antiguo municipio de San Lorenzo.

Faro o sanjuanero (plantasdemitierra-blogspot)
Pero no podemos dejar de mencionar que con el nombre común de "faro" o "sanjuanero" es conocido un arbusto que alcanza una altura de hasta 2,5 metros, de follaje plateado y de vistosa floración amarilla, endémico de La Palma y El Hierro (Gonospermum canariensis).


Casa y alpendre (Patrinet)
Aunque parece que es exclusiva de dichas islas, como algunas fuentes sostienen que se  cultiva como ornamental en otras islas, entre las que se incluye Gran Canaria y se ha escapado de cultivo en algunas zonas de medianías del norte, puede aventurarse que se diera en este lugar en el pasado, lo que le convertiría en un fito-topónimo.
Horno de pan (Patrinet)

Sin duda, uno de los principales atractivos de este caserío es su abundancia en bienes etnográficos tales como bancales, alpendres, eras, fuentes, acequias, cantoneras, estanques, etc., muchos de los cuales se encuentran en desuso debido al progresivo abandono del sector primario iniciado en la década de los sesenta del siglo XX.
Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

domingo, 27 de mayo de 2012

FARAILAGA (SANTA MARÍA DE GUÍA)

Topónimo aborigen. Se trata en realidad de dos caseríos, de Arriba y de Abajo, situados en el Morro Verdugado, en una desviación del naciente del antiguo «camino de herradura» que, partiendo de El Hormiguero, conducía hasta El Palmital y al Bosque de Doramas. La construcción de este camino etá documentada desde mediados del siglo XVI:

“Obligación que Juan Rodríguez, cortador, v.°, hace a Hernando de Padilla, v.°, de hacerle un camino, y a Damián de Azuaje también, para que puedan ir con sus recuas de sus ingenios a Fagalayraga y a las Tres Palmas, con estas condiciones:
1ª. Comenzará a hacer el camino desde el Barranquillo Salado hasta el Calejondo, sobre el cercado de armas; rozará las zarzas y abrirá el camino hasta el Barranco de Moya.
2ª. Lo hará lo más llano que pueda, de manera que venga en dos o tres vueltas hasta pasar el acequia sobre la choza, y hacer en la acequia una portezuela de piedras y madera.
3ª. Desde la portezuela abrirá un camino que está empezado, el cual alargará hasta dar a ir a un palmito, y de allí dará una vuelta hasta venir a dar a unas peñas donde está la tosca bermeja y de allí volver con el camino hasta subir hasta Fagalayraga a los caños nuevos de Pedro Acedo.
4ª. Lo hará ancho con sus paredes bien hechas donde conveniere. Por su trabajo le pagarán Padilla y Azuaje 30 doblas, Azuaje 15 y Padilla 15, de las cuales confiesa haber recibido 20; 5 de ellas se las ha de pagar Padilla cuando tenga hecha la mitad del camino. Comenzará a hacerlo a fines de este mes [agosto de 1552], y lo terminará en el mes de noviembre...”

Fairalaga Baja (Patrinet)
Antes de la Conquista los asentamientos en todo este territorio son notables, y los vestigios son abundantes. Existen algunos yacimientos arqueológicos en el lugar: en el de Arriba, hay nueve solapones naturales funerarios, con restos de muro de cierre, donde han aparecido restos óseos humanos, como fémures y tibias. En el de Abajo, hay un área de grandes dimensiones formada por solapones, cuevas naturales de índole funeraria, y muros de cerramiento. Se han recogido restos óseos muy fragmentados y de malacofauna (de moluscos).

En el Morro Verdugado existe también un conjunto de grandes dimensiones compuesto por cuevas funerarias, estructuras de piedra diversa, estructuras tubulares, solapones y restos óseos en importante cantidad, así como restos de cerámica y fauna.
Farailaga Alta (Patrinet)
En el extremo sur del mismo Morro se encuentra otro conjunto, en el lugar conocido como El Ojito y La Lapa, compuesto por varios solapones y una zona donde se aprecia material cerámico aborigen en superficie. Tres de ellos mantienen restos humanos. Es un conjunto de notable interés científico.

Por último, en el Lomo Vergara, que junto con el Morro Verdugado conforma el vaso de la presa de Los Verdugos, se encuentra una cueva artificial orientada al naciente y con una planta ovalada. Asociada a ella hay una escalera excavada en la roca igualmente orientada al naciente y algunas cazoletas de desiguales dimensiones.

Lomo Vergara (Patrinet)
Hay que tener en cuenta que toda esta zona está en lomos y morros entre las cuencas de los barrancos de Moya y los barranquillos de Calabozo y de Valerón que desaguan por San Felipe, siendo este último el que da nombre a los famosos silos del Cenobio de Valerón, sobre el que se sitúa también el «sabor» de El Gallego.

Se llega a la conclusión de que es una zona muy rica en yacimientos arqueológicos vinculados unos a otros por proximidad, a los que habría que unir las cuevas de diferentes dimensiones situadas en El Peñonal del Palmital Bajo, a muy poca distancia, en la que existen grabados, unos longitudinales en la entrada norte y otros históricos. Lamentablemente, muchos de estos yacimientos se encuentran en mal estado, con vertidos incontrolados de basuras y escombros, y carecen de protección. Solo se mantienen estables los de difícil acceso.

Caserío (Fedac)

Uno de los terratenientes de Guía en el s. XVIII, el Alférez Amador Espino Peloz, en escritura testamentaria de 16 de julio de 1701, decía ser propietario de cuatro fanegas de una «Suerte de tierra denominada “Lomo de Vergara”».

En el siglo XIX, con las experiencias y los capitales adquiridos por las continuas idas y venidas de los indianos, emigrantes canarios llegados de Cuba, se intentó implantar en Canarias un nuevo sistema productivo, introduciendo el denominado modelo cubano, que tenía como eje los cultivos de la caña de azúcar y del tabaco. En estos lugares, dada la bondad de sus tierras, se plantó tabaco. Ahí están, como testigo, las ruinas del secadero de tabaco construido en este caserío.

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)