jueves, 6 de septiembre de 2012

TAMARACEITE (LAS PALMAS DE GC)

Topónimo aborigen con el que se conoce a un antiguo asentamiento poblacional al poniente del término municipal de Las Palmas de GC, que constituye uno de los barrios más populosos que ha experimentado un fuerte crecimiento demográfico sostenido desde el último cuarto del pasado siglo XX.
Centro histórico (Google earth)
En cuanto al origen del topónimo esta voz o término aborigen viene de «palmeral», por derivar del nombre guanche del bereber alusivo a palmero macho y no a palmeras datileras «... Tamaraceite con ár. támra "dátil", de fonetismo, estructura formal o sentido distintos, podemos deducir que no son "semitismos" del guanche, sino formas derivadas del tronco común semitocamita» (ÁLVAREZ DELGADO, J.: "¿Semitismos en el guanche de Canarias?", Anuario de Estudios Atlánticos, nº 1, 1955). Otras fuentes apuntan que su significado podría ser «paso entre palmeras», si bien etimológicamente no dan la raiz del origen.

Si está claro que el término «támara» tiene para esta isla el primer significado de «Fruto de la palmera» (ACADEMIA CANARIA DE LA LENGUA: Diccionario Básico de Canarismos, Sta. Cruz de Tenerife, 2010), y es generalmente aceptado que los aborígenes canarios llamaban a la isla «Tamarán».

Támaras, también conocidas por "támbaras"
Una explicación próxima a estos significados es la descripción que hace Agustín Millares de una incursión de Juan Rejón en 1480: «… Su deseo, pues, de adelantar la empresa, y de señalar su vuelta al poder con alguna brillante victoria, le determinó a disponer sus tropas para una excursión en los llanos de Tamaraceite, donde se extendía un extenso palmar, lugar de recreo y propiedad del Guanarteme, por cuya circunstancia era con frecuencia y furtivamente visitado de los canarios…» (MILLARES TORRES, A., Historia de la Gran Canaria, Las Palmas de GC, 1997).

Desde 1476 se data la existencia de este cantón gobernado por un guanarteme o rey llamado Adeun, época en la que el lugar representa un agrupamiento poblacional eminentemente agrícola y pastoril que explotaba las tierras de su vega, comprendida entre el sector noroccidental de Los Lomos de Guanarteme o Montañas de Las Palmas y La Isleta, entre los barrancos de Guiniguada y de Tenoya, con poblados costeros y de enlace con la zona central de la isla, localizando su cabecera en las proximidades de La Montañeta.
Panorámica de 1925 (F. Baena - Fedac)
Durante la colonización, las crónicas hablan de capturas de ganado y productos agrícolas, y de la existencia de grandes palmerales: «… 500 hombres con hachas trajeron de este pago 60.000 palmitos…» y «… toda la isla es un jardín, toda poblada de Palmas, porque de un lugar que llaman Tamaraceite quitamos mas de sesenta mil palmitos y de otras partes infinitas y de todo Telde y Arucas…».

El desarrollo de la conquista, durante el siglo XV, tuvo un inmediato reflejo espacial. Entre las estrategias de acoso a la población aborigen, los conquistadores quemaban las superficies arboladas, práctica empleada habitualmente en la Reconquista de la España peninsular con objeto de evitar emboscadas. Existe constancia documental de esta circunstancia en la cuenca de Tamaraceite.
Panorámica s. XX (tamaraceite-blogspot)
Aunque no se conocen los repartimientos que Pedro de Vera (1485-1489) en el lugar, más aún cuando pueden confundirse con los ubicados como de San Lorenzo, por otras referencias posteriores se conocen algunos. En la data solicitada el 16 de octubre de 1551 el escribano público García Osorio dice:

«...que yo ove e conpre de los herederos de Gonçalo de Segura hermano de la sangre ocho hanegadas de tierra que le heran dadas en el Repartimiento de Tamaraseyte que son como pasamos el barranco de Tamaraseyte desta parte de la montañeta bermeja aca hazia el dicho barranco de Tamaraseyte y porque en el dicho Repartimiento y data que se le da dize que se las tome en la parte e lugar que quisiere y ay mas cantidad de tierras pido e suplico a vuestras señorias me hagan merçed de la demaçia que oviere de tierra como dize de barranco a barranco para las poder aprovechar e desmontar...» (RONQUILLO, M. Y AZNAR VALLEJO, E.: Repartimientos de Gran Canaria, Las Palmas de GC, 1998).

Otra información nos la aporta la petición que hace el escribano mayor del Cabildo Juan de Ariñez el 20 de marzo de 1552 cuando dice: «...me mandar dar una suerte de tierra que fue dada a Fernando Delias en el primero Repartimiento de Tamaraçayte desde el alberconsillo a la mano yzquierda e tiene por frontera çinquenta pasos al qual se fue desta ysla y es fallesçido y no ay heredero ...».
Vista casco histórico (Google earth)
Y en otra más que pide el mismo y privilegiado escribano, un mes después, el 20 de abril de1552 donde dice: «... le mandar dar doze hanegadas de tierra que son en Temaraçayte que fueron dadas a Martin Perez el qual se fue desta ysla y es en el primero Repartimiento que se hizo a las çinco suertes primeras del alberconsillo a mano yzquiera y tiene por frontera setenta e dos pasos ...».
 
Desde los primeros años las peticiones de tierras en considerado centro histórico de Tamaraceite se sucedieron tempranamente. El 14 de octubre de 1552 Antón Gutiérrez Batista pedía «... en Tamaraçeyte dos fanegas e media de tyierra de senbradura de trigo morisquillo poco mas o menos lo que en ella oviere, las quales fanegas son fuera del çercado de Françisco de Medina que lynda de la una parte fuera del dicho çercado del dicho Medina una montañeta e della otra parte un barranquillo que va al atajo del camino que va a Tenoya que en la dicha tierra tress años arro e la e desmontado y entra la mayor parte della debaxo de la dicha montañeta...».
Las escasas palmeras en la presa de los 80 del s. XX (tamaraceite-blogspot)
Se tienen noticias de que a a finales del siglo XVII se construyó una ermita a la entrada del pueblo, que pudiera ser la de La Mayordomía, que fue reconstruida en este mismo siglo por las inundaciones de 1641 debidas a las crecidas del barranco de Tamaraceite.

El lugar perteneciendo a la jurisdicción de San Lorenzo, se va conformando como un caserío rural con viviendas de propiedad, como la del Alférez Francisco Hernández Medina  y María del Río, que en escritura de 30 de abril de 1677, manifiestan ser propietarios de diecinueve fanegas en cuatro suertes de tierra, con casa de alto y bajo, en el lugar.

También el prestamista Capitán Juan Matos y María González en escritura de 26 de julio de 1680 dicen tener veinticuatro fanegas y once celemines de una «Finca de tierra labradía en Tamaraceite, con casas y un día y una noche de agua del Heredamiento del Dragonal», que en este caso accederían a la propiedad posiblemente por su astucia en los negocios.

Según René Verneau, aquí aparecen las primeras plantaciones de caña de azúcar; también habría que destacar los aprovechamientos comunales cerealeros y pastoriles de la Dehesa de Tamaraceite.
La nueva parroquia (figliosacrocuore-blogspot)
En el siglo XVIII continúa con la deforestación de toda esta zona hasta la práctica desaparición de las palmeras. Ya en este siglo, el licenciado, Canónigo de la Catedral y Fiscal del Tribunal de la Sta. Cruzada Esteban Manuel Gómez,  en escritura de 6 de febrero de 1718 dice ser propietario de treinta fanegas de «Tierras labradías y “arrifes” en Tamaraceite». Unos pocos años después, en 1735, el obispo de Canarias, Pedro Manuel Dávila y Cárdenes, a través de las Constituciones Sinodales le da una población de 100 vecinos.

Comienza entonces su crecimiento junto al camino Real hacia Gáldar y Teror, donde la viuda del Sargento Mayor Salvador Cayetano Manrique de Lara, Elvira Castillo Olivares, en escritura de 14 de julio de 1755 menciona como de su propiedad, por haberlas comprado, «Tres suertes labradías en Tamaraceite, en lo alto de la “junta” de los caminos de Teror y Arucas».
Subida a La Montañeta (Google earth)
Y también aparecen documentados topónimos hoy desaparecidos, que hacen referencia a curiosos antro-topónimos, posiblemente vinculados a hijas de los cargos de la milicias cuando el Familiar del Sto. Oficio de la Inquisición Juan González Travieso y Ana Suárez Fleitas, en escritura de 8 de abril de 1763, dicen poseer veinticinco fanegas y ocho celemines de un «Cortijo labradío y “arrifes” denominado “Las Capitanas” en Tamaraceite».

En el siglo XIX las referencias documentales habla de cultivos como el trigo, legumbres, papas y hortalizas, y se empiezan a construir importantes depósitos de agua. A la influencia de la agricultura y de los fenómenos naturales en la degradación del paisaje hay que sumar, desde mucho antes, el sobrepastoreo, ya que los rebaños de Tamaraceite permanecían aquí desde noviembre hasta julio, para después trasladarse a Valleseco o Firgas.

En el siglo XX, la introducción del plátano, del tomate y las nuevas construcciones contribuyen a que estas unidades de paisaje que conforman el espacio estén en continua transformación con un sorprendente crecimiento poblacional donde los diseminados asentamientos tienden a fundirse en una única entidad poblacional, quedando tan solo en el recuerdo de la memoria colectiva muchos de sus topónimos.


Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

miércoles, 5 de septiembre de 2012

TAMADABA, MACIZO DE (ARTENARA)

Topónimo aborigen con el que es conocido el macizo situado en el ángulo noroeste de la isla, a 1.400 metros sobre el nivel del mar. 

Desde los primeros tiempos de la Conquista preocupó la deforestación motivada por la tala descontrolada para alimentar las calderas de los ingenios azucareros donde era molida la caña dulce para la obtención del guarapo para su "purgado", actividad agrícola-industrial que fue auspiciada por los propios gobernadores de la isla con el objetivo generar riqueza.

Panorámica (Águedo Marrero - Sergio Socorro - Rincones)
Tal preocupación llevó a que en la promulgación dn las Ordenanzas del Concejo de 1531 -no habían pasado 50 años- se prohibió la tala de árboles madereros en la Selva de Doramas para los ingenios del distrito de Gáldar -entiéndase, norte de la isla a partir del barranco de Azuaje- porque ya estaba muy afectada, y se autorizó en este lugar de Tamadaba.

Andenes (lospasosquedejamosatras-blogspot)

Decía la norma: «… e que a los dichos engenios de Gáldar de aquy adelante por el dicho tiempo de los dichos quinze años se les da licencia para cortar leña en la montaña de Tamadaba dando a cada yngenio cincuenta o sesenta pinos hasta ochenta que sea cada uno de dos palmos de frente y señalados porque sean gruesos e grandes e los aprovechen e no talen la montaña a hecho so pena que sy cortaren en la dicha montaña de Tamadaba syn que le sean señalados los pinos o cortaren otros pinos demás de los señalados yncurran en pena los señores de los engenios…» (MORALES PADRÓN, F.: Ordenanzas del Consejo de Gran Canaria (1531), Sevilla, 1974).
Casa Forestal (grancanaria-com)
Las tierras permanecieron de realengo, si bien fueron concedidas datas por el Cabildo General en sus riscos y laderas, como lo prueban las concedidas en el año de aprobación de la Ordenanza a Anton de Quintana y cinco años después a Bernardino de Carvajal, el primero hijo de conquistador y el segundo escribano público de Gáldar y Guía.
Pinar húmedo (grancanaria-com)
También fueron habituales las licencias para el corte, como es el caso de la petición realizada por el regidor Felipe de Sobranis del 3 de enero de 1541: «...me hagan merçed de darme liçençia para hazer palma para el serviçio de mis yngenios para mi leña de la montaña de Tamadava ençima del barranco de A(g)aete enfrente del engenio nuevo del dicho lugar por(que) tengo mucha nesçesidad...» (RONQUILLO, M. Y AZNAR VALLEJO, E.: Repartimientos de Gran Canaria, Las Palmas de GC, 1998).

Pero no sólo se cortaba palma, como lo prueban los muchos contratos antes y después de la Ordenanza (LOBO CABRERA, M. Y OTROS: Los usos de la madera: recursos forestales en Gran Canaria en el siglo XVI, Las Palmas de GC, 2007):    

Atardecer (David Hdez)

Contrato del 12 de septiembre de 1530 «Juan González, cortador de leña, y su hermano Gonzalo Yáñez, estantes, sde conciertan con Mateo Cairasco, vecino , se obligan a cortarle 2.000 cargas de leña de pino, acebuche y almácigo, que ha de dar puestas en cargadero en su camino desde el ingenio de Cairasco o en el barranco del heredamiento que viene del pinar de Tamadaba, por precio de 20 maravedíes por carga, y ha recibido a cuenta 10 arrobas de azúcar a dobla. Se obliga a poner la leña en el lance que pueda cargar y abrir camino, y tenerla cortada por todo el mes de enero.»

Contrato de 22 de enero de 1567: «Manuel Pérez, almocrebe, vecino, se obliga servir en el ingenio de Francisco Palomar en Agaete, con tres caballos de aparejo que tiene para echar leña y cortarla en la montaña de Tamadaba, que comenzare a hacer desde luego y no alzará mano hasta acabar la zafra. Pago: Por cada carga de 10 arrobas que cortare y echare 2 reales. Acabada la zafra se ha de hacer cuenta y razón de las cargas que ha recibido, que han de ser de brezo, pino, acebuche, escobón y la otra leña que en la montaña de Tamadaba hay. Hipoteca los caballos que tiene..
Tomillo de Tamadaba (grancanria-com)

Contrato de 24 de junio de 1571:«Pablo Martin y Baltasar Lorenzo, vecinos de Guía, se obligan a echar con sus carretas a los señores Hernán Peraza y Francisco Palomas 3.000 cargas de leña de pino de la Montañeta de Tamadaba, dándoseala cortada del barranco de la Mimbre hacia la casa por aquel derecho hacia la cumbre, comenzando desde primero de julio hasta fin de septiembre primero, por precio conforme se apreciare por el cortador, dándole por 1.300 cargas qeu están cortadas, a razón de 30 maravedíes por carga, y el resto a cumplimento de las 3.000 a medio real cada una.

Atrás ha quedado la historia más remota y en la actualidad está calificado como Parque Natural, este macizo y la franja costera del mismo, constituido por materiales de los más antiguos de Gran Canaria.

El llamado "pinar húmedo" que abarca una superficie ee 376 hectáreas no puede considerar de los representativos de la isla; el "pinar seco" que ocupa 1.520 hectáreas es donde se han realizado repartidas repoblaciones del "pino canario".

El macizo desciende por laderas de fuertes pendientes, encajados barrancos y escarpados acantilados creando una impronta de gran belleza en el paisaje.

Geológicamente, viene conformado por los macizos de Altavista-Tirma y de Tamadaba, que constituyen una muestra espectacular, erosionada y aflorante del más primitivo edificio del Mioceno Medio de la isla. Estos macizos quedan excavados por los valles de Guayedra-La Palma y del Risco-Tirma, y cortados en potentes acantilados en El Valle, Guayedra, Faneque, Andén Verde y Punta de la Aldea.
Herrerillo común (R. Zamora Padrón)

En las zonas altas de Tamadaba, se instala un bosque de pino canario de características subhúmedas y aparece el bello endemismo local tomillo de Tamadaba (Micromeria pineolens)

El pinar es hábitat de un buen número de invertebrados y aves como el herrerillo (Parus caeruleus). Además, los riscos y paredones son refugio de una rica biodiversidad vegetal con una significativa proporción de especies exclusivas.


Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

TALIARTE (TELDE)

Actualización 29-mar-2016
Topónimo aborigen con el que se conoce la punta de la costa este de la isla situada entre Playa del Hombre y Playa de Melenara, lugar en el que se ha construido un pequeño puerto preferentemente de utilidad para el Instituto Canario de Ciencias Marinas allí ubicado.

Vista del puerto (rosagrancan-blogspot)
Eran escasas las noticias que informaban de la posible existencia de un poblado aborigen costero, como lugar destacado del faycanato de Telde, con una función de atalaya de vigilancia sobre un litoral por donde, en numerosas ocasiones y desde el siglo XIV, habían arribado distintas expediciones de mallorquines y posteriormente de castellanos y portugueses que ocasionaban cuantiosas bajas y expolios.

Por la particularidad de la costa, de difícil accesibilidad conformada por acantilados y "bufaderos", se estimaba que la elección del lugar se debía a estas condiciones, ya que permitía otear de manera panorámica de norte a sur, controlando de alguna forma las ensenadas naturales que luego serían el puerto de la madera de la GaritaMelenara y Gando.

Las pequeñas calas con fondos arenosos eran los puntos más favorables para fondear las embarcaciones y el desembarco de las tropas, y por tanto la fragilidad de la defensa que debería vigilarse.

Vestigios del Talayón (teldeactualidad-com)
Los vestigios encontrados recientemente en el lugar, inesperadamente por unas obras de urbanización, confirmaron la existencia del llamado Talayón de Taliarte, del que no se conocía su ubicación exacta.

La excavación realizada de manera casual ha dejado al descubierto un conjunto de muros de clara factura prehispánica en la parte alta del lomo, consistente en tres complejos situados en una porción de terreno de unos seiscientos metros cuadrados que, en la medida que avancen las investigaciones arqueológicas, irán conociéndose sus aprovechamientos.

Puerto e Instituto de Ciencias del Mar (fotosaereasdecanarias-com)
Este descubrimiento confirma de alguna forma el topónimo aborigen, al que se ha dado el significado de «pueblo [arte] de vigilancia [tali]», según algunas fuentes. Ya decía Abreu y Galindo que «… Los canarios, como estaban lastimados de los sobresaltos y alteraciones que cada día les daban, estaban muy sobre aviso, siempre puestas sus atalayas por la costa…».

No obstante, habría de contemplarse que los vestigios encontrados sean en su definición los restos de los caserones habitacionales del “pueblo [arte] de vigilancia [tali]”, dado que no debemos prescindir de la información que aporta la toponimia cuando muy próxima se encuentra la montaña de la Atalaya, de la que tratamos en entrada independiente a este Blog, que sí sería el punto alto de observación desde el que los canarios oteaban el horizonte, denominación que responde a lo recogido por el DRAE, en su segunda acepción: «atalaya.- 2. f. Altura desde donde se descubre mucho espacio de tierra o mar».

Estación radio-telegráfica (1920 Herrmann Kurt - Fedac)
Y este topónimo ya es conocido desde los primeros tiempos de la historia de la isla, apareciendo así mencionado en los repartimientos realizados a favor de Hernan Moron y Alvaro Rodriguez, quienes el dos de octubre de mil quinientos treinta y solicitaban:

«… nos hagan merçed de un pedaço de tierras de seuero que es adelante del barranco de Diego de Silva hazia Aguimes las quales dichas tierras son y comiençan desde la Atalaya hasta llegar a las tierras de Gonzalo Perez que están a la banda de abaxo en que podría aver çinquenta hanegadas de senbradura poco mas o menos …» (RONQUILLO, M. Y AZNAR VALLEJO, E.: Repartimientos de Gran Canaria, Las Palmas de GC, 1998).

Taliarte de alguna forma ha estado siempre vinculado a la innovación tecnológica, pues ya en el primer cuarto del pasado siglo XX se instaló allí  la central radio-telegráfica de la isla, que suponía un gran avance en las comunicaciones de entonces.

Vista aérea (rosagrancan-blogspot)
El que este lugar se haya convertido en un lugar de investigación marina obedece a las inmejorables condiciones de los fondos marinos, en los que existe una gran colonia de «gorgonias».

La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria ha creado allí un Parque Científico-Tecnológico, como proyección de futuro del Instituto Canario de Ciencias Marinas, junto al que se ha construido el puerto.

Gorgonia amarilla (gobiernodecanarias-org)
Las «gorgonias» son a menudo confundidas con organismos vegetales debido a su aspecto de arbusto, perteneciendo en realidad al reino animal. Los "gorgonáceos", conocidos sencillamente como «gorgonias», son pólipos o cnidarios sésiles que forman colonias, formadas por una estructura córnea flexible de forma arborescente e irregular que ellos mismos segregan.

La estructura es tal que la disposición de los pólipos suele ser en un solo plano, de donde surge otra de sus denominaciones comunes "abanico de mar" al enfrentarse a la corriente de agua. Esta estructura puede llegar a tener un metro de alto por uno de ancho.

El proyecto de futuro del centro se fundamenta actualmente en el diseño de una "plataforma" desde la cual se investigue la biodiversidad de las profundidades del Atlántico. A nivel internacional las instalaciones más parecidas a este modelo son los observatorios que se empiezan a instalar utilizando plataformas petrolíferas fuera de uso, ya que hasta ahora no se ha construido una estructura específica como la que se viene estudiando.

Planta experimental (mispeces-com)
La "plataforma" canaria no será solo un observatorio, sino también una base desde la que la comunidad científica y tecnológica nacional podrá acceder al océano profundo de forma permanente, en el entorno de la propia plataforma, y, de forma eventual, utilizando los instrumentos y la maquinaria disponibles en ella.

El parque científico es una instalación multifuncional que dispone de diferentes espacios como naves para el desarrollo de proyectos empresariales de investigación aplicada; naves de cultivo para la aplicación de proyectos mixtos ULPGC con empresas y laboratorios científicos privados, además de un salón de actos y sala de reuniones, entre otras dependencias. Además dispone de laboratorios de química ambiental, laboratorios de oceanografía biológica y física y laboratorios de ecología marina.

Banco de algas (teldeactualidad-com)
En el mismo lugar se ha ubicado también el Banco Español de Algas (BEA), servicio nacional de I+D+i (Investigación, desarrollo e innovación) adscrito al Centro de Biotecnología Marina (CBN) de la ULPGC que tiene como objetivos básicos el aislamiento, identificación, caracterización, conservación y suministro de microalgas y "ciano-bacterias".

Además de estas funciones, clásicas de toda colección de microorganismos, el centro pretende ser un servicio que facilite el desarrollo de un nuevo sector bio-industrial basado en el cultivo y aplicaciones de las microalgas marinas.

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)