lunes, 9 de julio de 2012

MASPALOMAS, FARO DE (SAN BARTOLOMÉ DE TIRAJANA)

(guias-masmar-net)
Ya quedaron atrás los tiempos en que el Faro constituía la única construcción existente en este punto de la isla, después de la dunas de arena y del palmeral. Era un referente para la navegación marítima, y lo sigue siendo.

Pero también era una definición toponímica del lugar donde se encontraba, donde era difícil entender Maspalomas sin su faro, porque su posición en las fotografías del lugar, identificaba el ángulo desde el que se habían captado las imágenes, y todas las que se tiene desde los primeros tiempos de la fotografía, es un componente que destaca en ellas.

Sin su presencia, cualquier imagen de las dunas pudiera ser artísticamente bella, pero seguramente de difícil localización.

Ensayo modificando
 color  y localización

En la actualidad su silueta destaca entre todas las construcciones que le rodean, contribuye decisivamente a recrear el paisaje, a humanizarlo. La magnífica obra de ingeniería que proyectó Juan de León y Castillo constituye el edificio civil de mayor importancia histórica y monumental desde Telde hasta el sur de la isla, y más allá del sur.

Su historia arranca de 1861, en concreto del 19 de junio, fecha de un Informe de la Comisión de Faros sobre Complemento del alumbrado marítimo de las Islas Canarias, en el que se propone, además de otros nuevos faros en el Archipiélago «… uno de Primer orden, de luz fija o centelleante, en la Punta de Maspalomas, al Sur de Gran Canaria…» colocando la construcción de este faro en primer término y considerándolo el más indispensable, precisamente en una época de progresivo auge y rivalidad entre los principales puertos isleños.

La construcción del Puerto de Refugio de La Luz en la Ciudad se acompañó además de la dotación «… de un lazareto sucio en las costas de Gando…» y también «… de un faro de primer orden elevado en la punta más meridional de la isla, llamada de Maspalomas, que sirviese de señal a todos los buques que por aquella parte recalasen, faro de indiscutible importancia en la navegación por ser Canaria la primera isla del grupo que se encuentra en aquella dirección, se dio al Archipiélago una supremacía que no han podido disputarle la Madera ni Cabo Verde…».

Todo ello queda de manifiesto en que su construcción se justificaba por el hecho de que servía de recalada a todas las líneas de vapores, tanto de África y Oceanía como de América, así como a los barcos que faenaban en las pesquerías del banco canario-sahariano, quedando aprobada por Real Orden de 3 de septiembre de 1881.


Visita al Faro en 1935 (Fedac)
Todos los pormenores de la obra se recogen en el proyecto elaborado por el ingeniero Juan de León y Castillo, un meticuloso trabajo que de por sí constituye un pequeño monumento, habida cuenta de la calidad de la propuesta y de lo cuidado de su exposición y justificación.

De entrada, la elección del lugar no fue caprichosa, pues se seleccionó un espacio próximo a la por él llamada playa de la Boca del Río, en la desembocadura del barranco de Maspalomas. Se trataba de un lugar libre de dunas y en el que «… a 3,50 metros de profundidad, existe un banco resistente y sólido de arenisca…». Justamente este punto se eleva 2,20 metros sobre el nivel de la marea máxima.

Detalle vista áerea (Desiré Navarro)
Hasta tal punto cuidó León y Castillo los detalles y tal era su sensibilidad, que no fue ajeno a la salvaje belleza del lugar y lo que ello podría suponer para los futuros técnicos que se ocuparan de la instalación, señalando que «… el terreno contiguo es muy ameno y hará agradable la estancia de los torreros…».


Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

MASPALOMAS, CHARCA DE (SAN BARTOLOMÉ DE TIRAJANA)

Topónimo con el que se conoce desde la antigüedad la charca natural que se encuentra situada en la Punta de Maspalomas, en la desembocadura del barranco de Fataga, topónimo que toma de los Llanos de Maspalomas territorio donde se encuentra.

En la cartografía de la isla de Joseph Ossavarry en 1806, se incluye en este lugar el topónimo de Charco Azul junto a la desembocadura del allí llamado barranco de Maspalomas, que no es otro que el de Fataga aguas arriba.

Igualmente, es reflejado este mismo topónimo en la carta topográfica realizada por Sabin Betherlot en 1838, si bien en otros documentos aparecen referenciados ambos, la Charca de Maspalomas y el Charco Azul, por lo que no se puede precisar si son los mismos.
1940 (Naranjo Suárez - Fedac)
En la cartografía de Francisco Coello de 1848 se mencionan muy próximos, y siguiendo en este orden en la dirección de norte a sur, el Charco Azul y las Lagunas de Maspalomas, de donde pudiera desprenderse que son dos distintos, posiblemente un «charco» con cierta profundidad y libre de vegetación que refleje el color del cielo azul, y unas «lagunas» que pudieran ser unas marismas que podrían coincidir con el viejo topónimo que ha quedado al naciente de la Charca y al norte del Alto del Gato, en el complejo dunar, conocido como Charcos de Las Lapas, que pudo haber existido por los detalles de su formación que más abajo se esbozan.
Fotografía de 1955 (Fedac)
En la actualidad  todavía se conoce en la isla un topónimo de Charco Azul que se encuentra muy lejos de este lugar, en el barranco de Soria y muy cerca de la presa homónima, que posiblemente tuvo su origen en un "pilancón" en el barranco.

Aparece documentalemente el topónimo ya desde el 12 de mayo de 1695, escritura donde Francisco Amoreto al distinguir entre salinas viejas y nuevas, dice que las viejas se componen de ciento ochenta tajos, más treinta y siete tajos y un cocedero que están en la Charca de Maspalomas; y las nuevas, de ciento doce y otros cuarenta tajos que aún no producen sal, están en Aldea Blanca y son las conocidas como de la Caleta.
Fotografía de 1960 (Fedac)
En la definición de «charco» que hace Viera y Clavijo (Diccionario de Historia Natural), describe en el siglo XVIII un escenario de ensueño:  

«… Merece en el primer lugar el célebre charco de Maspalomas, cerca de la punta de este mismo título, al mediodía de la isla. Es una marisma o lago de dos tiros de fusil, que en la embocadura de un barranco forma el mar, confundiendo unas aguas con otras, y haciéndolas salobres. Abunda en anguilas y peces. Las aves del país y las que vienen del Africa lo animan, con especialidad palomas, patos berberiscos, gaviotas, becadas, etc. Sus riberas están vestidas de una maleza de aneas y tarayes...».
Postal de 1960 (Fedac)
En esa descripción paradisíaca probablemente resulta confundido por el topónimo de Maspalomas para indicar literalmente «con especialidad palomas», pues nunca han existido palomas en el lugar. Según Octavio Trujillo Ramírez ("La avifauna de la charca", A.C.E.C. Viera y Clavijo) las primeras referencias sobre las aves de la Charca de Maspalomas parten de mitad del siglo XIX (Bolle, 1857), siendo destacada su importancia también posteriormente por otros ornitólogos (Thanner, 1910; Bannerman, 1912; Volsoe, 1951).

Además de las citas de numerosas aves limícolas, se mencionan otras como el milano real (Milvus milvus), ya extinguido en Canarias, o el águila pescadora (Pandion haliaetus), que ha desaparecido como nidificante en la isla. Algunas otras como la polla de agua (Gallinula Chloropus) y la focha común (Fulica atra) fueron citadas también por Thanner (1910) como nidificantes. 
Polla de agua (ichn-iec-cat)
Sin embargo, llama más la atención la nidificación y posterior desaparición en 1914 (Bannerman, 1963), del único pato que se ha reproducido en Canarias en tiempos históricos la cerceta pardilla (Marmaronetta angustirostris), una anátida que se encuentra actualmente en regresión a nivel mundial.

En la actualidad se han detectado un total de cuarenta especies, siendo la polla de agua (Gallinula chloropus), el chorlitejo chico (Charadrius dubius) y el chorlitejo patinegro (Charadrius alexandrinus) nidificantes, mientras que el resto se corresponde con aves migratorias en paso regular invernantes o de presencia ocasional en las islas.

Luis Hernández Calvento de la Universidad de Las Palmas de GG en su trabajo para la Revista Rincones del Atlántico, describe su formación geológica como sigue:

«… Durante los últimos millones de años, en el vértice sur de la isla de Gran Canaria, se ha ido forjando un singular espacio, el sistema dunar de Maspalomas, caracterizado por la presencia de grandes dunas que avanzan desde la playa de El Inglés hacia la de Maspalomas y la desembocadura del barranco de Fataga.

En su formación, los procesos fluviales y marinos han sido determinantes, pues de su interrelación surgió una planicie deltaica de unos cuatro kilómetros cuadrados. Este delta, generado al resguardo de una terraza alta pleistocena (que hoy sustenta la urbanización de El Inglés), fue el escenario en el que se sucedieron, e imbricaron, diferentes ambientes (lagunas litorales, dunas, saladares, playas de arenas y de callaos), que conformaron un basamento constituido por depósitos sedimentarios aluviales, eólicos, marinos y lacustres.

Con la última regresión marina, esta plataforma quedó expuesta a la arribada de sedimentos arenosos, transportados por la corriente de deriva. Estas arenas, en un volumen extraordinario, han ido accediendo paulatinamente al territorio emergido por la playa de El Inglés, al este.
Panorámica aérea (fotosaereasdecanarias-com)
Una vez secados en el estrán, los vientos efectivos del NE han transportado incesantemente los granos de arena hacia la playa de Maspalomas, al sur, dando forma, en su desplazamiento, a un campo de dunas de especial interés. Durante su progresión, las arenas fueron transformando el paisaje original del delta, obligando a las aguas del barranco a circular por sus canales occidentales, hasta definir un trazado semejante al actual.

En su desembocadura, la barra de arenas que constituye el sector occidental de la playa ha participado en la formación de una serie de lagunas litorales (de las que hoy sólo queda la charca –o charco– de Maspalomas) que han dado sustento a un humedal y a un palmeral, conjunto que ha recibido el nombre de Oasis de Maspalomas…».

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

domingo, 8 de julio de 2012

MARZAGÁN, VALLE DE (LAS PALMAS DE GRAN CANARIA)

Topónimo con el que se conoce el valle situado al sur del Lomo El Sabinal, al norte del barranco de Las Goteras, al naciente de la Caldera de Bandama, y, al poniente de Cuesta Ramón y Jinámar, donde se asienta un populoso barrio.
Marzagán en 1930 (Augusto Valmitjana - Fedac)
En relación al origen de su nombre considerado por unos topónimo aborigen, puesto en duda por otros, decía Abreu y Galindo al hablar de la procedencia de la raza de los canarios:

«… También me da a entender hayan venido de África, ver los muchos vocablos en que se encuentran los naturales destas islas con las tres naciones que había en aquellas partes africanas, que son berberiscos y azanegues y alárabes. Porque Telde, que es la más antigua población de esta isla de Canaria, y Gomera, y Orotava en Tenerife, son nombres que se hallan en el reino de Fez y Benamarín. (…) Hay unos pueblos que llaman de este nombre Telde, de manera que en los nombres propios parece conformar y en muchos vocablos apelativos, los de estas islas con los africanos. Y dello se puede colegir qué nación haya venido a cada isla, conforme a la consonancia de los vocablos…».

Mazagan-El-Yadida (Joko-Facile)
Este paralelismo en los topónimos que establecía Abreu y Galindo debe aplicarse a este lugar, pues se trata de una derivación por su similitud del Mazagán marroquí, sin la «erre» de la primera sílaba. El puerto portugués de Mazagán fue reconstruido en el siglo XVI cuando Portugal se expandió en Marruecos. 

Es uno de los primeros asentamientos portugueses en la costa occidental marroquí, y por tanto representa el inicio del Imperio portugués en África. Mazagán, que es una parte de la ciudad de El Jadida, está a noventa kilómetros al sudoeste de Casablanca. En el año 2004 fue declarado patrimonio de la Unesco.

Resulta curiosa la coincidencia cuando Viera y Clavijo dice de la información facilitada por el Gobernador Portugués de Mazagán, en relación con las noticias recibidas de Drake «… que Morato Arraez se aprestaba con 20 galeras para echarse sobre ellas…», refiriéndose con «ellas» a los ochenta navíos al mando de Francis Drake «… con designio de maltratar alguna de las Canarias…».

Valle del Draa (El Yadida)
Y continúa: «… Entonces fue quando el Ayuntamiento de Canaria pidió polvora al de Tenerife, en una Carta, cuyo contenido tiene todo el merito de la simplicidad. Empezaba de esta manera: “Dios dé a vuestras Señorías buenas y santas Pasquas para que le sirvamos. Yd le es notorio quan amenazada está esta Isla, así de Morato Arraez como de Francisco Drake; y aunque se han hecho, y se están haciendo todas las prevenciones necesarias para defensa de la Isla, y ofender al enemigo, nos hace mucha falta el no tener la polvora necesaria. 17 de Mayo de 1587…”, Tenerife le franqueó la que pudo...».

Al margen de esta referencia histórica, curiosa porque asegura que existía de alguna forma comunicación entre el Mazagán marroquí y Canarias, está acreditado que los portugueses que viajaban hacia Guinea y el Océano Índico ocuparon Tánger en 1471 y Mazagán del reino de Fez en 1514. 

Igualmente, que la participación de portugueses en la conquista de Canarias fue notable, e incluso que próximo a este lugar está la Torre de Gando que fue asaltada y conquistada por Diego de Silva, general del infante Enrique de Portugal.

No es de extrañar que el antiguo valle de Marzagán trajera a alguno de estos portugueses recuerdos paisajísticos de las tierras interiores de El Jadida de aquella época.
Casas de finca (Fedac)
En cuanto a noticias documentales del topónimo, el 15 de septiembre de 1763 se protocoliza la venta de tierras realengas a Miguel Marcelino, de un sitio «… para fabricar una hermita de Nuestra Señora, con el titulo de la Blanca, sachistia y casa para el sujeto que cuide del aseo de dicha Santa Ymagen, con la plaza correspondiente en el Llano del Cerrillo, donde llaman Marzagán…». En la actualidad la festividad que se celebra en el lugar es la de la Virgen de las Nieves.
Finca de El Mondalón, antes de su restauración (Fedac)
Cuatro años después, el 20 de julio de 1771 realiza su testamento el canónigo de la Catedral Cristóbal Abreu que  declara tener en este lugar un cercado de cuatro fanegas plantado de viñas con un lagar de cantería azul de Arucas y un trozo de tierra de dos fanegas plantado también de viñas, concedido por el Cabildo para fabricar una casa el 21 de julio de 1763, por el que paga 20 reales antiguos a favor de los Propios del Cabildo General de la isla.


Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

MARTELES, CALDERA DE LOS (VALSEQUILLO)

Actualización 12-dic-2017
Topónimo con el que se conoce un caldera de formación volcánica situada muy cerca del centro de la isla, rodeada por El Salviar donde está el Roque Grande en los riscos de Tenteniguada, la Montaña del Pleitolas Cabezas donde nace el barranco de Guayadeque, el Llano de Marrubio y la cuenca del barranco de Madrelagua, pudiéndose contemplar la misma desde la carretera Los Pechos-Telde (GC-130).

Es prácticamente el centro de un territorio calificado como Reserva Natural Especial, sector de cumbres en el área centro-oriental de la isla que afecta a varios municipios. Al norte limita con los escarpes erosivos de los riscos de Tenteniguada y al sur con el amplio cauce del barranco de Tirajana, mientras que hacia el este se inclina suavemente por los lomos de Temisas y acoge el encajado cauce del barranco Cernícalos.

Fotografía: Nacho González
Flor tomatero silvestre (www.floradecanarias.com)
Este espacio alberga destacados elementos geomorfológicos como la caldera, estructura explícita freatomagmática, volcánica por la interacción de agua y magma.

Importantes formaciones vegetales como los acebuchales y saucedas de barranco de los Cernícalos, y especies de plantas amenazadas como el raro endemismo grancanario tomatero silvestre (Solanum lidii) localizado en Temisas.

Conforma la única cuenca cerrada que posee la isla. Los geólogos suponen que en su origen el barranco de Madrelagua, que nace en la zona más elevada de la isla y tiene una red de pequeños tributarios, recoge aguas de la Mesa del Cuervo.

Fondo de la caldera (turismovalsequillo-com)
Debió de ser un tributario a su vez del barranco de Guayadeque, pero la violenta explosión volcánica que dio origen a esta caldera interrumpió su curso y por ello vierte sus aguas en el fondo de la caldera, aportándole materiales que la han transformado en una excelente tierra de cultivos.

La caldera está prácticamente encajada entre el Morro de la Caldera, junto a la Presa de Cuevas Blancas, Cuchillones de la Caldera y el Morro de las Ortigas u Ortigones, quedando al naciente la Montaña del Pleito.


Era (Fedac)
La más antigua referencia que se tiene de la caldera la encontramos en el repartimiento concedido al zapatero Juan Perez y Cristobal Cardero, cuando en su solicitud del 9 de agosto de 1549, describen todo el contorno del lugar: «... les hagan merçed de dozientas hanegadas de tierras en la sierra las quales  an por lynderos de la parte de abaxo la fuente de Savzejo e yendo por el barranco arriba a dar donde se dize la Caldereta e atravesando hasta venir derecho al Roque de Tintiniguada un lomo blanco abaxo que viene a dar a la Caldera ...» (RONQUILLO, M. Y AZNAR VALLEJO, E.: Repartimientos de Gran Canaria, Las Palmas de GC, 1998).

El nombre de la caldera guarda relación con la familia Martel, una de las familias más importantes de Valsequillo, a la que perteneció Pedro Martel, que fue su primer alcalde por Real Orden de 1802, y a la que pertenece también Sebastián Martel, que ocupa el número 19 de los compradores de fincas desamortizadas en el siglo XIX que adquirieron más de doscientas fanegas en toda la isla. En concreto, adquirió quinientas cuarenta y siete fanegas por el precio de 23.076 reales de vellón.


Almendreros en la caldera (turismovalsequillo-com)
Pero la caldera antes conocida como la Caldera de la Montaña del Pleito hasta finales del siglo XIX, en razón del pleito que mantenían el nuevo Ayuntamiento de Valsequillo con el Ayuntamiento de Ingenio por el deslinde de ambos es este lugar, que termina en 1890.

«En  la Caldera de la Montaña del Pleito, en la cumbre a 11 de junio de 1890, reunidas las comisiones de los ayuntamientos de Ingenio y Valsequillo, para el deslinde y amojonamiento de los dos términos municipales, acordaron nombrar nuevas comisiones que estuvieran mejor enteradas y por tanto se dio por terminada. Firmaron por Valsequillo Pedro Martel Martel, el alcalde, Sebastián Martel Florido, Francisco Martel concejales y el secretario Agustín Artiles, y por Ingenio Manuel Rodríguez y Ramírez, Blas Domínguez, Juan Morales, Gregorio Mateo y Francisco Domingo.» [SUÁREZ MARTEL, J. (1996). Aportaciones a la Historia de Valsequillo. Telde: Ed. Cabildo de Gran Canaria, Ayuntamiento de Valsequillo et Salcai].

A partir de este acto histórico, los vecinos comenzaron a llamarla Caldera de los Marteles, en recuerdo de los tres 'Marteles' que firmaron por Valsequillo.


Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

MARPEQUEÑA (TELDE)

Topónimo que identifica un pequeño barrio junto a la Autopista del Sur (GC-001), al sur de Las Remudas y La Mareta, y al norte de Las Rubiesas, cuyo origen está vinculado el asentamiento en la antigüedad de los «libertos», llamados así los esclavos que obtenían su carta de libertad.

Los moriscos y negros libres en Canarias formaban una comunidad coherente, semejante a la de los portugueses y genoveses, pero aún más estrechamente ligados.
Vista aérea (teldeactualidad-com)
Se casaban entre sí, tenían sus mejores amigos y peores enemigos dentro de ella, se prestaban dinero mutuamente y preferían hacer entre ellos cualquier tipo de negocio. Esta solidaridad hace que se agrupen en determinadas zonas de las ciudades, en barrios que llevaron su nombre o el de su lugar de origen.

Los esclavos fueron traídos a Canarias para trabajar en el cultivo de las tierras, en los ingenios azucareros, e incluso en trásito para su venta en América. Aquí eran vendidos como partes de las haciendas.
Ingenio azucarero (revistaambienta-es)
En la Ciudad, los moriscos se agrupaban en la calle de su nombre, a las espaldas de la iglesia de la Concepción, en el barrio de Triana. En Telde dejaron constancia en los topónimos tales como Berbería y este de Marpequeña.

El primero correspondía a un sector del casco de Telde en donde en 1586 fueron concentrados los moriscos por orden del inquisidor Ortiz de Funes, concretamente en la zona antigua de los Llanos de Jaraquemada, lo que hoy es las inmediaciones de la iglesia de San Gregorio, y la Marpequeña se localizaba en un lugar del antes llamado Tabaibal, parte del cual lo ocupa hoy este pago.

Los topónimos creados por los asentamientos de los esclavos por la isla son muchos. En Santa María de Guía hay lugar llamado de la Berbería . En otras zonas encontramos grupos de moriscos y negros agrupados. Por ejemplo, en el cerrillo de Santo Domingo, cercano al convento de San Pedro Mártir, existía un contingente de negros, situados allí por la devoción que prestaban a la Virgen del Rosario, patrona de su cofradía. También se deben a su presencia los distintos barrancos llamados del Negro, de la Negra, de los Negros, Salto del Negro, etcétera.
Detalle cartografía costa del África subsahariana de Ortelius 1595 (Juan Tous)
El comercio de esclavos con destino a los ingenios azucareros propició «las cabalgadas», a partir del siglo XV, que se hacían sobre las costas de África para su captura. La circunscripción adonde los nuevos isleños dirigieron sus ataques y razzias quedó limitada a partir de los tratados de Alcacovas, Tordesillas y Sintra.

Desde entonces dirigirán sus entradas a la zona comprendida entre el Cabo de Aguer y el cabo Bojador, con puntos importantes, adonde acudirán una y otra vez, en Geida, el Bugidor-Cabo Bojador, límites de las operaciones, tal como se clarifica en algunas escrituras: «… del cabo Bojador arriba, que, se entiende que no ha de ir a la conquista del rey de Portugal…»; San Bartolomé, Cabo de Aguer, Mar Pequeña y Tagaoz, siendo estos cuatro últimos puntos los más visitados.
Detalle cartografía costa África septentrional de Ortelius 1595 (Juan Tous)
Pedro Agustín del Castillo, que en 1686 había levantado un plano de aquellos lugares, expresa en su historia que terminó en 1737, que Mar Pequeña dista de Lanzarote treinta y tres leguas de travesía de mar, y se halla a la boca de un río que entra la tierra adentro más de tres leguas, capaz de goletas, bergantines, etc., por donde entró Herrera con sus barcos lo más arrimado a tierra.

Se deduce de todo esto que la Mar Pequeña era la que daba entrada al río, en cuyas márgenes se hallaban construidas las fortalezas, o sea la que se interpone entre la costa y las islas de Lanzarote y Fuerteventura, siendo aquel río uno de los que se hallan situados en el territorio que ocupó España, es decir el Aluet Null, cuyo fondeadero se denomina Draa, no debiendo olvidarse que el río Aluet Null se llamó después Non y en la actualidad Chibica.

El río Draa, en Marruecos, nace del Dades, el Ziz y el Meski, pasa cerca de Tamagrut y sirve de frontera con Mauritania hasta su unión con el Marhals. Sus afluentes por la derecha son: Segid, Akka, Tana y Temenert, Su curso es de más de mil kilómetros. Siguen, después, el Guiara y el Sequía el Hamra, cuya cuenca no forma ya parte del imperio marroquí.

Las crónicas confirman que, si bien el adelantado Fernández de Lugo trató de establecer en 1500 una fortaleza distinta de las citadas en un punto de Mar Pequeña, distaba mucho de este sitio el castillo de Santa Cruz, que también estaba junto a Mar Pequeña, lo que demuestra que solo a los grandes errores cometidos anteriormente en nombres y distancias, debe su origen el haberse confundido el castillo de Santa Cruz de Mar Pequeña con Mar Pequeña misma.
Cuarto de obras (Fedac)
Volviendo a esta isla de Gran Canaria, el topónimo perdura en el siglo XVIII documentalmente y aparece en testamento del 12 de enero de 1726 donde Francisco Hernández de Quesada y Sebastiana Falcón dicen ser propietarios de ciento ocho fanegas y ocho celemines de «Tierras en Mar Pequeña».

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

MARMOLEJO (GÁLDAR)

Topónimo con el que se conoce un caserío al sudeste de San Isidro, al que se accede desde la antigua carretera de Gáldar al  Cruce San Isidro (GC-292), enclavado en un territorio que fue parte de la agrícola Vega de Gáldar.
Estanque (Fedac)
Según algunas fuentes se trata de un antro-topónimo que tiene su origen en la hacienda de Francisco de Marmolejos en el siglo XVI, a quien se le registra compareciendo como testigo en un reconocimiento de deuda.

Se trata de un protocolo de Alonso de San Clemente donde se dice «… Antonio Chirinos, vecino de la villa de Gáldar, reconoce que debe a Diego Álvarez, sastre, vecino de esta villa, que está presente, una bota de vino clara y limpia, buena de dar y tomar de dieciocho arrobas, por razón de que se le ha pagado y se compromete a entregarlo a fin de septiembre primero que viene. Testigos: Francisco de Marmolejos y Lázaro Ortiz, alguacil…».
Cantonera (Fedac)
Un Francisco de Marmolejos aparece en la historia acompañando a Francisco de Pizarro en la conquista de Chile, que era natural de Fresgenal y testó en Indias en el último cuarto del siglo XVI, de donde también lo era Alonso de Fregenal que hacia 1513 obtuvo tierras en la Guía que entonces pertenecía a la jurisdicción de Gáldar.

En Telde se perdió un antiguo topónimo de Marmolejos, muy cerca de Cendro, en el que se detectaron ocupaciones ilegales y del que tampoco se tienen más noticias.


Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)



MARÍA RIVERA, LLANOS DE (LAS PALMAS DE GC Y SANTA BRÍGIDA)

Actualización 9-sep-2017

Topónimo que corresponde a un llano donde se encuentra un asentamiento poblacional situado entre La Angostura y La Calzada, muy próximo a Siete Puertas, al que se llega desde la carretera La Calzada a Santa Brígida por La Angostura (GC-320), y tras pasar el puente de La Angostura, tomar a la derecha la carretera de acceso (GC-322). La carretera de acceso, actual calle Llanos de María Rivero, conforma el deslinde municipal entre Las Palmas de Gran Canaria al norte y Santa Brígida al sur.

Majada (Fedac)
El origen del topónimo se debe a que en este entorno tuvo su hacienda el matrimonio formado por María Rivera y Francisco Rodríguez en el siglo XVII, siendo el poder económico de ella la que dio su nombre al lugar, aunque también pudo haber sido su predecesora la que hizo acopio de riquezas pues hay constancia de que en 1556, en la Era Cercada del cercano Puerto de las Galgas, Ana Ribera vende unas tierras de pan sembrar (las que se destinan para sembrar cereales y otras semillas).

Si parece claro que el antro-topónimo María Rivera debe ser de finales del siglo XVI o principios del XVII, pues no figura cuando se habla del camino real que por aquí pasaba en las Ordenanzas del Concejo de 1531, que decía:


«… y de ay el camino que va a dar al yngenio del licenciado de la Coba y de ay derecho al camyno que ba desta cibdad al puerto de las Galgas e de ay el dicho camyno arriba a la madera hasta las tierras del calafate e de ay a dar entre las tierras del Gallego a las de Juan Andúxar e de ay…».

Acequia (Fedac)
El ingenio del licenciado De la Coba se encontraba en La Angostura, y a continuación menciona lugares cercanos como las Galgas y Juan de Andúxar, pero no menciona a Maria Rivera.

En los documentos públicos se aprecia la ambivalencia de los topónimos, como es el caso del testamento de 24 de julio de 1758 de Catalina Naranjo Quintana, quien al describir sus propiedades dice de ocho fanegas de un cercado

«… de viña y árboles en Siete Puertas, en el Puerto de las Galgas»
; de cincuenta y dos fanegas de otro «Cercado de viña, árboles y tierra calma denominado Llano de Maria Rivera, en Siete Puertas, con casa de alto y bajo, cocina, lagar y otras dependencias»; y de tres fanegas de una «Suerte de tierra cercada de pared en la Era Cercada del Puerto de las Galgas».


El único topónimo que en la actualidad ha variado es la Era Cercada que se llama la Era Vieja situada al norte de los Llanos de Maria Rivera.

Presa El roque (Fedac)
Otra corrupción se ha producido también en el nombre del actual Lomo Gordo, antes del Sordo, puesto que en la escritura del 11 de mayo de 1759, presumiblemente del hermano de la anterior, el Receptor jubilado del Sto. Oficio de la Inquisición Juan Naranjo Quintana, quien cuando describe sus propiedades dice de setenta fanegas de:


«Tierras labradías y montuosas en el Puerto de las Galgas y Lomo del Sordo»; y veinte fanegas de «Tierras labradías con higueras en el Lomo de María Rivera».

Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)
Deslinde municipal: calle Llanos de María Rivera (IDE Gran Canaria)