miércoles, 5 de junio de 2013

PLATA, HOYA DE LA (LAS PALMAS DE GC)

Actualización: 2013/07/20
Topónimo con el que se conoce el pequeño barrio situado en el llamado "cono sur" de Las Palmas de G.C., al sur del barrio de San Cristóbal.

Se trata de un cromo-topónimo que hace referencia al sustrato del suelo calizo blanquecino, asociado a una depresión del relieve abierta hacia la costa este, difícil de observar en la actualidad dado el grado de urbanización de la misma. 
Vista de nuevas construcciones (Google earth)

El uso del calificativo de "plata" para definir el color que en otros lugares de la isla es toponímicamente llamado "blanco" o "blanquizal", ha sido bien documentado por los filólogos:

«Hay una serie de topónimos en Gran Canaria cuyo término específico Plata nada tiene que ver con el "metal blanco, brillante sonoro, dúctil y moldeable, más pesado que el cobre y menos que el plomo", que define el DRAE, sino con el sentido del adjetivo que también recoge el DRAE-92 en su acepción 9: 'plateado, de color semejante al de la plata-, y específicamente la 3.ª acepción del DUE de M. Moliner: 'color blanco'.

Ni en los suelos de Canarias ha habido nunca plata ni en la historia de las Islas ha habido comercio que explique y justifique tantos topónimos así nombrados y en lugares tan impropios para el comercio, como Hoya de la Plata (Las Palmas de Gran Canaria), Barranco de la Plata (San Bartolomé de Tirajana), Llano de la Plata (Guía), Paso de la Plata (San Bartolomé de Tirajana), o simplemente La Plata (San Bartolomé de Tirajana y Valsequillo). Por el contrario el color blanquecino de los suelos de esos lugares los iguala y hace semánticamente motivado el nombre que tienen. 

Detalle del sustrato color "plata" (Google earth)
De la misma manera debe interpretarse el Lomo Platero que hay en San Nicolás de Tolentino» (TRAPERO, M.: "La estructura semántica de los nombres de color en la toponimia. La cromotoponimia de Gran Canaria", Revista de Dialectología y Tradiciones Populares, Tomo L, 1995).


Con respecto a la inclusión de los tres los topónimos que llevan el término "Plata" de San Bartolomé de Tirajana, ya hemos tratado en su entrada particular a este Blog que los mismos se relacionan con las rutas de las trashumancias pastoriles, que no guarda relación con el significado aquí dado. 

Ortofoto con el dominante color "plata" (Google earth)
La aparición del topónimo, aún cuando no esté documentada siglos atrás por no concurrir en el lugar acontecimientos relevantes, hay que catalogarla como antigua al tratarse de una antigua -valga la redundancia- costumbre toponímica, al igual que lo fueron las pesquisas infructuosas para localizar este metal precioso en la isla:

el 8 de noviembre de 1499 el Rey y la Reina dictan en Granada «Orden al ldo. Diego Hernández de Valera, juez pesquisidor de Gran Canaria, para que informe sobre la aparición de plata en el Carrizal, que fue comunicada al rey por Lope Sánchez de Valenzuela, gobernador de dicha isla» (AZNAR VALLEJO, E.: Documentos canarios Registro General del Sello. 1476-1517, Sta. Cruz de Tenerife, 1981). 


La "hoya" en foto aérea de 1962 (Fototeca - IDE Gran Canaria)
El primer asentamiento lo fue en la ribera de costa, junto al antiguo Camino Real que conducía a Telde, donde se edificó una pequeña ermita de espaldas al mar que sería demolida en los primeros años de la segunda mitad del siglo XX para la construcción de los dos carriles de la Carretera del Sur.


Era en este lugar donde convergían los dos caminos reales que procedentes de la Ciudad conducían a Telde, el más antiguo que desde la Portada de Vegueta en la muralla sur, bordeando el lomo de Santo Domingo por la Vega de San José; en el segundo cuarto del siglo XIX quedaría abierto el otro camino que discurría junto a la costa por el «caserío de San Cristóbal hasta la Hoya de la Plata donde empalma con la carretera del sur» (BOLETÍN OFICIAL DE CANARIAS, 22-feb-1865). 

Entre ambos caminos quedaba la finca conocida como Filipinas, propiedad del Condado de la Vega Grande. 

Antigua panorámica de las dos salidas al sur (AA.VV. San Cristóbal)
El 19 de marzo de 1969 se abriría al culto la nueva iglesia construida bajo la advocación de san Francisco Javier, donde sería llevado el retablo de la Virgen de la Caridad del Cobre, para seguir siendo venerada por los cubanos residentes en la isla.

Es una de las tres vírgenes existentes en la isla -está también en la iglesia de la Orilla Baja de Sardina del Sur y en una capilla en La Furnia en Gáldar- que se deben al cumplimiento de promesas de indianos.

Antigua ermita (Parroquia de San Cristóbal)


De la Virgen de la Caridad del Cobre, nombrada patrona de Cuba en 1916, la leyenda cuenta que fue encontrada por los hermanos Juan y Diego De Hoyos, y un criollo de diez años llamado Juan Moreno, tras tres días de tormenta en la bahía de Nipe entre 1605 y 1638; y la historia dice que existía una ermita en el Cerro de la Mina donde residía un ermitaño donde pudo ser llevada por el comisionado del rey para las minas de cobre, Sánchez de Moya.

En la actualidad la imagen se encuentra en un santuario a unos kilómetros de la ciudad de Santiago de Cuba, provincia del Cobre. 

Actual iglesia parroquia (figliosascrocuore-blogspot)
La historia de la imagen venerada en Hoya de la Plata «... ésta está relacionada con una mujer. Dña. María Amador fue descrita por los entrevistados como “la fundadora de la parroquia”, ya que ella fue la que inició el movimiento que acabaría con la construcción de la iglesia primero y la declaración de parroquia después.

Fue un hermano suyo, Silvestre Amador que había emigrado a Cuba, quien trajo alrededor de los años 50 la imagen y el altar donde está colocada desde el Caribe. Alrededor de la imagen hay una especie de murete hecho con piedras, que tienen un aspecto ferruginoso, procedentes al parecer de uno de los ríos de Santiago de Cuba» (SANTANA JUBELLS, G.A.: "Las fiestas de la Virgen de la Caridad del Cobre, un caso de sincretismo americano en Canarias", XIII Coloquio de Historia Canario - Americana y VIII Congreso Internacional de Historia de América -AEA, 1998). 
La patrona cubana por las calles de La Habana (EFE)

Su celebración y veneración en esta isla donde se calcula residen 4.000 cubanos y subsisten las prácticas de la santería, van más allá: « Una imagen, con unas características determinadas, es concebida de distinta manera por diferentes grupos de personas que participan en las fiestas en su honor. Tenemos por tanto que en un mismo grupo humano, los que se reúnen el 8 de septiembre para honrar la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre, conviven cosmovisiones y significaciones diferentes que van en un continuum desde la advocación cubana de la Virgen María, Madre de Dios, hasta Ochún, la orisha de las aguas dulces y de la sensualidad, pasando por los que recuerdan en el acto su tierra natal con añoranza.


Las ofrendas de frutos tropicales como en el caso de Hoya de la Plata, de flores, incluso de joyas como cadenas, medallas, etc., pueden ser interpretados según una doble lectura ya que, salvo la sangre de animales, esos son precisamente los elementos que se ofrecen a un orisha en su fiesta. Distinguir claramente entre los participantes quien participa de una cosmovisión y quien de otra es, a simple vista, una tarea imposible. Precisamente esa era una de las funciones del hecho sincrético, función que sigue vigente hoy en día. Los esclavos querían evitar que sus amos supieran que seguían adorando a Ochún o a Yemayá» (IBÍDEM).
Costumbrismo canario en Cuba (cubaespañola-blogspot)

La veneración y celebración no es exclusiva de los cubanos residentes, pues son muchos los grancanarios que se congregan en los tres lugares en que está presente la imagen de la Virgen. Es conocido que Cuba fue destino para los emigrantes canarios, con arribadas masivas en la primera mitad de los siglos XIX y XX.


Los canarios en Cuba mantuvieron arraigadas las costumbres desde aquí llevadas, conservando así su etnicidad e identidad, siempre con la meta de volver a su tierra como "indiano" con la bolsa llena:

«Durante el siglo XIX fue muy común el mito de las brujas que volaban desde Canarias y raptaban los hijos producto de las uniones pecaminosas de canarios con cubanas. Esta imagen se podía asociar más a la opción de los que venían a Cuba a trabajar por una temporada, estando siempre latente la idea de que aquellas uniones ponían en peligro la posibilidad del regreso a las islas para reunirse con sus familiares» (ROSARIO MOLINA, J.C.: "Procesos de etnicidad e identidad cultural de la inmigración canaria en la región suroriental de Cuba", XIII Coloquio de Historia Canario - Americana y VIII Congreso Internacional de Historia de América -AEA, 1998). 

Campesinos canarios en Cuba (cubaespañola-blogspot)
Aún siendo así que para los emigrantes grancanarios en Cuba «Las prácticas sociales y simbólicas de los grancanarios se consagraron a través de la metáfora de la familia como mecanismos más potente de recurrencia al origen y la sangre isleña, que permitía articular pasado, presente y el futuro para confirmar la conciencia étnica y la identidad del grupo frente a una sociedad con fuertes contrastes etnoculturales» (IBÍDEM), la concurrencia de la celebración el 8 de septiembre de Virgen de la Caridad del Cobre y de la Virgen del Pino, ambas de gran veneración por sus "milagros" y auxilios frente a los años de calamidad, facilitó que reconocieran en la primera a su patrona.


Convergencia que se acrecienta para el emigrante grancanario que compartió el sentimiento y comportamiento: «En Cuba son las madres y esposas las que piden y ruegan por el resto de la familia. Se pide por el destino de la familia, la salud, por los difuntos y familiares cercanos, los que se encuentran distantes» (IBÍDEM).

El desaparecido caserío de la Hoya de la Plata junto al mar (AA VV San Cristóbal)

La emigración canaria en masa de todos los tiempos, siempre tuvo su origen en la exclusión económica «... a partir del último cuarto del siglo XIX y primer tercio del XX se produjo una nueva intensidad migratoria, motivada por los mecanismos estructurales determinantes de los factores de atracción y expulsión de las economías americanas, especialmente de Cuba destino prioritario de nuestro flujo migratoria de esta hora  y de Canarias. A la creciente profundización de la opción librecambista, propia del capitalismo isleño, destructora, por las razones ya apuntadas, de las economías campesinas tradicionales, se unía un capitalismo que en la Gran Antilla intensificaba el empleo de mano de obra libre en ingenios y plantaciones.

Factores estructurales a los que se agregaron otros de carácter coyuntural la crisis de la grana en este lado; la modernización de los ingenios y la ampliación de los cañaverales y de las plantaciones de tabaco en el otro, cuyo ritmo e intensidad respondían a los ciclos de bonanza y contracción de ambas economías, únicamente interrumpidos en el caso de Cuba por la guerra emancipadora» (MACÍAS HERNÁNDEZ, A.M.: "La migración Canarias-América. Un proceso histórico-sociocultural", Guize,  Vol. 2, 1995).
Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

martes, 4 de junio de 2013

PERNADAS, LAS (ALDEA DE SAN NICOLÁS Y MOGÁN)

Actualización: 2013/06/25 
Topónimo con el que se conoce un amplio territorio rústico y un lomo situado al poniente del cauce del barranco de Veneguera, entre su septentrional Hoya del Almácigo y Los Tableros situados al sur, y otro igual más al norte al sur de la Degollada de Tasarte, muy cerca de la divisoria con la Aldea de San Nicolás, jurisdicción donde volvemos a encontrar el topónimo junto a la Montañeta de los Tajinastes, al sur de la Cañada del Palmito y al norte de la Cañada de Cho Pedro Diaz.
Panorámica (Patrinet)

El origen del topónimo hemos de vincularlo al canarismo con el que se conoce al «Conjunto de las ramas que forma cada una de las secciones de un árbol» (ACADEMIA CANARIA DE LA LENGUA: Diccionario Básico de Canarismos, Sta. Cruz de Tenerife, 2010) recogido de la expresión «El viento me tumbó una pernada grandísima del nisperero», de donde puede presuponerse que en estos lugares hubieron pinos centenarios de gran tamaño u otras especies de gran porte que fueron taladas siglos atrás.

No obstante se adjudique por la Academia Canaria a esta isla de Gran Canaria el uso exclusivo del canarismo, es conocido popularmente en Tenerife el "Castaño de las siete pernadas" de Aguamansa (La Orotava), que mide más de doce metros de circunferencia, y a poca altura de su tronco parten siete grandes gajos, que han quedado reducidos a cinco por los vientos, así como el llamado "Pino de las dos pernadas" en Vilaflor, cerca del conocido "Pino Gordo".
 Castaño de las siete pernadas (canariastenerifenorte-com)

Se tienen antiguas referencias de la existencia en este lugar de Mogán de la posible existencia de un yacimiento arqueológico, uno más de la notable y numerosa presencia de vestigios en esta zona de la isla que permaneció por muchos siglos reservada para su población aborigen dedicada al pastoreo. 

Pino de dos pernadas
(losviajesdebrujilda-com)


Aunque no guarde referencia alguna con el lugar por el que pasan los viejos senderos de Tasarte a las Casas de Veneguera y hacia su ribera, no podemos sustraernos al significado que tiene en el DRAE el llamado "derecho de pernada": «derecho que se ha atribuido al señor feudal, por el que este yacía con la esposa del vasallo recién casada » y su práctica en la cultura aborigen que ejercían sus guanartemes y faicanes.


Algunos autores mencionan la costumbre cuando han rebatido las teorías de que la muerte de Hernán Peraza a manos de los gomeros, lo fuera por su relación con la bella Iballa, dedicada al culto de las ceremonias en las cuevas de Guachedun donde la visitaba:

«Estoy firmemente persuadido de que esas lamentaciones por los inmorales amores de Peraza con Iballa nacieron sólo en la mentalidad cristiana de nuestros cronistas, no en la de los indígenas o sus contemporáneos. Ellas están en abierta oposición con cuanto sabemos de la poligamia en Tenerife, del derecho de pernada de los guanartemes y faizanes grancanarios, de la hospitalidad de lecho de las indígenas gomeras y majoreras y del número de los hijos ilegítimos y con esclavas indígenas de que hablan los conquistadores en sus testamentos, hasta medio siglo después de muerto Hernán Peraza» (ÁLVAREZ DELGADO, J.: "El episodio de Iballa", Anuario de Estudios Atlánticos, nº 5, 1959).

La generalización del uso del canarismo (losviajesdebrujilda-com)

Otros autores al comentar las crónicas de Andrés Bernáldez dicen «El cap. 66 está consagrado a Gran Canaria, de cuyos habitantes dice que poseían diversas leyes y costumbres. Por ejemplo, cuando habla de casar alguna doncella "poníanla ciertos días en vicio", a engordar. Salía de allí para desposarse y entonces los caballeros e hidalgos del pueblo se acercaban a ella, que debía elegir uno para acostarse antes de hacerlo con el que sería su marido. Si quedaba en estado, el hijo que hubiera sería noble o caballero. Si no, los hijos de su marido serían comunes, y, para saber si quedaba preñada, el marido "no llegaba a ella fasta saber por cierto, por vía de la purgación".

Esta y otras costumbres -apotegma- "como de alimañas" tenían. Las Casas recogerá también esta costumbre y la vinculará al África, y Abreu Galindo, paliando el dato, la compara al derecho de pernada medieval, de modo que también los cristianos practicaban tales costumbres » (MORALES PADRÓN, F.: "Canarias en los cronistas de Indias", Anuario de Estudios Atlánticos, nº 10, 1964).


Dados los atributos de la mujer indígena muy bien descritos por Fray José de Sosa, no ha de extrañar la satisfacción que pudo trasladar a los conquistadores de la isla estas normas de "hospitalidad": «El color trigueño, mayormente los hombres que las mugeres, las mas eran muy blancas, muy pulidas y hermosas, casta que como ellas no salieron á pelear, hasta hoy se ha quedado; siendo el mejor mujeriego de estas siete afortunadas islas el de Gran Canaria, pues aunque hay en las otras, mayormente en la de Tenerife, damas muy bien parecidas, no obstante entre todas el brío, hermosura y garbo canario, es conocido» (Topografía de la Isla Afortunada de Gran Canaria, Sta. Cruz de Tenerife, 1849).
Árbol con dos pernadas en La Palma (Rayco)

Dando por ciertas y documentadas estas costumbres aborígenes, tampoco debemos alarmarnos por ello, pues ya advertía el primer investigador citado que:

«La inmoralidad de esas prácticas de infanticidio y poligamia, desde el punto de vista ético general, y de inmoralidad cristiana en particular, es tan condenable como las normas de prelibación o "derecho de pernada" en Canarias y en la Europa medieval, y la de hospitalidad de lecho practicada por los guanches de las Canarias, según nuestros textos, en tres islas al menos. (...) Y tampoco puede estimarse que tales noticias denigren a la raza indígena, ni que injurien u ofendan a una isla.

Pues todas esas prácticas comentadas en este capítulo aparecen registradas en varias islas, y bajo diversas formas en otros pueblos de la tierra, cultos o más adelantados que los guanches, establecidos más ó menos tiempo y en semejantes circunstancias, por motivos análogos a los de los guanches» (ÁLVAREZ DELGADO, J.: "Instituciones políticas indígenas de Gran Canaria. El Sabor", Anuario de Estudios Atlánticos, nº 27, 1981).

Localización del primero de Mogán (Espacios Naturales de Gran Canaria)