lunes, 23 de abril de 2012

CAMBALUD (FIRGAS)

Topónimo situado en la carretera de Arucas a Moya (GC-300). El nombre del caserío, que por el crecimiento poblacional reciente es ya barrio, tiene su origen en las tierras que fueron de Domingo González Cambalud.

Casa (Fedac)
Próxima al mismo se encuentra la Presa de la Marquesa de Arucas, limítrofe con la Villa de Firgas, construida a principios del s. XX para el riego de las tierras que el marquesado tenía en Las Hoyas.

Presa de la Marquesa (Fedac)
En este lugar, la Capellanía de Francisco y Gaspar Quintana Ayala tuvo tierras que fueron divididas y vendidas el 3 de junio de 1871 por su poseedora Nicolasa de la Torre Navarro, una suerte a Manuel González Medina y la otra a Santiago Guerra González, cada una por 4.500 reales de vellón.

Localización (Espacios Naturales Gran Canaria)

CAMARETAS, CASERÍO Y HOYA DE (SAN MATEO)

Actualización 15-mar-2016
Este espacio rural se encuentra situado en el barranco del mismo nombre, formando una hoya, entre Cueva Grande y el Lomo de Cuevas Altas de la Hoya del Gamonal, continuación del Lomo de los Ingleses; la mejor forma de acceder hasta el lugar es a través del camino del Lomo de los Ingleses que nace en el acceso a La Asomada-La Lechuza (GC-414), desde la carretera de San Mateo-Telde (GC-041).


Bancales de Camaretas (Fedac)
El topónimo es mencionado en varios repartimientos de tierras, el primero el 9 de abril de 1549, Diego Gutierrez, Gaspar Viera y Françisco Ruyz, en su petición de las tierras dicen «... en la Syerra çiento y çinquenta hanegadas de tierras montuosas que tienen linderos de la una parte tierras que dieron a Ximon Lopez en el lomo arriba y por otra parte la hoya del Gamonal que va a dar a los paredones altos bolviendo a dar a las camaretas ...» (RONQUILLO, M. Y AZNAR VALLEJO, E.: Repartimientos de Gran Canaria, Las Palmas de GC, 1998).

Meses después, el 30 de octubre del mismo año, el liçenciado Luys de Betancor, quien como buen conocedor de las letras copia literalmente la descripción dada en la petición anterio cuando pide «... me hagan merçed de me dar en la Sierra çiento e çinquuentaa fanegadas de tierras montuosas que han por linderos de la una parte tierras que dieron a Ximon Lopez en el lomo arriba e por otra parte la hoya del Gamonal que va a dar a los paredones bolviendo a dar a las Camaretas ...» (IBIDEM).

Siglos después se menciona en documentos públicos del siglo XVIII, como queda acreditado en los bienes vinculados de Bartolomé Navarro del Castillo en su testamento de 25 de noviembre de 1717, que incluye las siguientes fincas en Camaretas: siete fanegas de Suerte de tierra labrada; cuatro fanegas de Suerte de tierra labradía, dentro del Cercado Grande, con cien brazas de pared. Diez años después, entre los bienes vinculados de Margarita Leiba Herrera Medraño, el 6 de julio de 1727, incluye cuarenta fanegas de un «Cortijo labradío y de “arrifes” con una cueva y gañanía en Camaretas».

Ortofoto (IDE Gran Canaria)
Del origen del topónimo, sólo pueden desarrollarse algunas tesis, algunas que pudieran ser coincidentes que avalarían que fuera un etno-topónimo derivado de la interpretación que los primero castellanos que llegaron al lugar, dieron de lo que allí observaron.

Es sabido que allí se han encontrado vestigios arqueológicos, como la cantidad de cerámica aborigen encontrada en la Cañada de Bilandre, así como los topónimos próximos como el Lomo de las Cuevas Altas, el Lomo de las Sepulturas, la Cueva de Los Reyes, El Palomar, y la Cañada de la Fortaleza. Estos topónimos nos dicen de "cuevas habitacionales en altura", de vestigios funerarios, todos en altos andenes defensivos que los convertían en auténticas fortalezas.

Cuando Sebastián Covarrubias desarrolla el término “cama”, dice que «En las aldeas en tierra de Salamanca, ay unas camas encaxadas, tan altas, que es menester una escalera para subir a ellas. Y de aquí sospecho le debieron decir cathres, un cierto genero de camastros cinchados, no embargante que se traen de las Indias; y las camas de cordel gruesso, de que se encordelan las camas, y este uso es muy antiguo» (Tesoro de la lengua castellana, o española, Parte Segunda ..., compuesto por el Licenciado Don Sebastian DE COVARRUVIAS OROZCO, 1673).

Pastel de risco (nacerdelatierra-blogspot)
Aunque es una expresión moderna, no dudamos que pudiera tener su raíz Etimológica en las embarcaciones de entonces. «Camareta.-1.f. Mar. Cámara de los buques pequeños. 2. f. Mar. Local que en los buques de guerra sirve de alojamiento a los guardiasmarinas» (DRAE). En el habla canaria su significado es "cueva en la que hay un naciente o formada por el naciente".

Puede también que guarde relación con la belleza de las formaciones geológicas del lugar próximo al caserío por el capricho de la naturaleza, siendo por tanto un geo-topónimo. Se mantiene la teoría de que las aguas, discurrentes durante un período de al menos tres millones de años en este lugar que constituye una de las cabeceras del llamado aguas abajo barranco Guiniguada, han cortado verticalmente las formaciones geológicas, que se hallan atravesadas por "diques" que mantienen normalmente una dirección perpendicular a los torrentes.

Por esta belleza del lugar, se ha creado allí el Aula de la Naturaleza de Camaretas, con fines educativos y medioambientales, a una altitud de 1350 metros y en el interior de un pinar junto a la Hoya de Camaretas.

Tajinaste azul (floradecanarias-com)
La belleza y el olor de los retamales y magarzas compiten con los pinos, castaños y pastos en dar vistosidad al lugar, que merece ser considerado de alto valor paisajístico y estético, que unido a sus enormes posibilidades como área experimental para la regeneración del bosque subtropical de laurisilva, le confieren un gran valor recreativo, científico y educativo.

Tiene gran valor florístico y se encuentran en ella especies de vital interés científico. Predominan la Flor de Piedra, endemismo canario considerado como raro en esta isla, así como el Pastel de Risco, también llamado porpularmente Verol o Bejeque (Aeonium) y especies arbustivas como el Tajinaste Azul, la Flor de Mayo leñosa, en peligro de desaparición, elementos de laurisilva, como el folao o follado canario, y ejemplares arbóreos de laurel.

El Tajinaste Azul (Echium virescens) es un endemismo que pertenece al grupo de especies arbustivas ramificadas, con varias inflorescencias densas y cilíndricas. Se distingue por que la corola de las flores no se encuentra comprimida lateralmente y es de color rosado a azul pálido. Las inflorescencias son cilíndricas y las hojas son lanceoladas, con pelos similares por ambas caras.

Flor de mayo leñosa (floradecanarias-com)
La Flor de Mayo leñosa (Pericallis webbii) es un endemismo de la isla de Gran Canaria. Se diferencia del resto de especies por tratarse de una hierba perenne, con hojas orbiculares e inflorescencias que poseen entre 10-20 capítulos. Las lígulas son de color blanco a carmín y los flósculos centrales, de color morado. La Flor de Mayo fue señalada en 1984 por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza como una de las doce especies de flora y fauna más amenazadas del mundo.

Se trata de una planta de porte arbustivo de casi dos metros de altura que únicamente crece en los riscos más inaccesibles de Tenteniguada y en las hoyas de Camaretas y de Gamonal. En la actualidad ha mejorado sensiblemente y se localiza en otras zonas húmedas de la isla pero de menor talla.

Follao canario (floradecanarias-com)
El follao canario (Viburnum rigidum) es un endemismo de las islas. Se trata de un árbol de hasta siete metros de altura, con ramas marrón-rojizas por abajo erectas. Hojas coriáceas, vellosas por ambas caras, con bordes enteros y ápice agudo. Flores blancas, de unos seis milímetros de ancho, dispuestas en umbelas. Frutos carnosos, ovales de color marrón oscuro, morado o negro.

La avifauna del lugar es rica en variedad y en algunos casos en cantidad. La variada presencia de aves en esta zona, muy modificada en lo que debió de ser su estado natural, se explica por la nueva colonización del lugar por especies que teóricamente no deberían estar allí.

Localización (IDE Gran Canaria)

CALZADA, LA (SANTA BRÍGIDA)

Dice Claudio de la Torre Millares (1895-1973) en su obra Las Canarias Orientales: Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura que «… El poblado de La Calzada se llamó anteriormente de San Jerónimo de la Calzada. En él establecieron algunas familias importantes, de las que aún quedan sus casas solariegas. Entre estas familias estaba la de O’Shanahan, de origen irlandés, que erigió la ermita de la Concepción en el siglo XVI. Esta familia acogió en su época a los fugitivos irlandeses que llegaban a Canarias, perseguidos por el fanatismo de Isabel I de Inglaterra, facilitándoles la emigración a América…».

Las afirmaciones de dicho autor pueden aportar dudas por desconocerse sus fuentes. En cuanto a la primera presencia del apellido O'Shanahan en Gran Canaria, Lino Chaparro D'Acosta en su obra  "Heráldica de los apellidos canarios" afirma que tiene rama en las Islas, pero no concreta su antigüedad  pues aún cuando en el siglo XV ya se hallan más o menos consolidados los apellidos hereditarios por la obligatoriedad (iniciativa del Cardenal Cisneros) de hacer constar en los libros parroquiales los nacimientos y las defunciones. Pero siendo así, en las zonas rurales y entre la gente más humilde, la norma del apellido paterno hereditario para los hijos no se fija hasta el siglo XIX, con la creación en 1870 del Registro Civil.

Y en cuanto al nombre del santo, consultado el santoral parece contener una errata, pues aparece tan solo Santo Domingo de la Calzada, y tampoco se menciona la fuente o bibliografía utilizada por el autor, pues parece más bien confundir o fusionar dos noticias distintas.

La Calzada en 1893 (Carl Norman Fedac)
La primera es que se sabe de la antigua existencia de la Hacienda del Convento de Sto. Domingo, próxima a este lugar, y pudiera ser que estos dominicos le dieran el nombre al lugar. Uno de los lugares que muestran el pasado aborigen próximo a este lugar es la Cueva de los Frailes, excavada en el volcán de la Caldereta, que se encuentra antes del puente de La Angostura. Debe su nombre a dos frailes, Juan de Lebrija y Diego de las Cañas, los cuales pidieron permiso a Pedro de Vera para que les dejase interceder con los aborígenes, con escasos resultados y un final bastante dramático. Formado por 37 cuevas naturales este yacimiento fue descubierto en 1933.

La segunda que está acreditada es la existencia del vínculo de Jerónimo del Río Loreto (1760), que construyó una ermita bajo la advocación de San Jerónimo y Nª.Sª. de Candelaria en su hacienda. Las propiedades aportadas al vínculo le fueron reconocidas por sentencia de la Audiencia por auto de 22 de mayo de 1750 que aprueba la concesión de un sitio en el Lentiscal a favor de don Jerónimo del Río. Concretamente lo que hoy se conoce como Finca de los Ríos.

Acueductos (Fedac)
En el lugar existían otras propiedades y otras ermitas, como resulta del testamento de Matías Lorenzo Fernández, Licenciado y Capellán de Santa María en la Catedral, que con fecha 17 de septiembre de 1711 dice tener quince fanegas compradas de «Cercado denominado “Hidalgo”, plantado de malvasía y árboles, en La Calzada. Cercado de malvasía y vidueño, tierra calma, casa, bodega, lagar, una casa alta, dos casas terreras y la ermita de Nuestra Señora de la Concepción en La Calzada. Cercado de pan sembrar con un día de agua del Heredamiento de Tafira y ocho horas de agua del Heredamiento de la Fuente de Bribisca». Esta últimas fincas están en el lugar conocido en la actualidad como La Concepción, entre Las Portadas y El Castaño en las márgenes de la carretera a Almatriche.

Este lugar se encuentra situado al inicio de la carretera de La Calzada a Santa Brígida por La Angostura (GC-320), a partir del cruce con la carretera de Tafira (Casa del Gallo) a Almatriche (GC-310).

Localización (Espacios Naturales Gran Canaria)

CALVARIO, EL (SAN BARTOLOMÉ DE TIRAJANA)

Según la Guía Informativa de Tunte, el nombre de este lugar que hoy rotula una calle del casco de San Bartolomé de Tirajana, se debe al difícil camino que se tenía que recorrer cada vez que se trasladaba a un difunto desde algunos de los diversos pueblos hasta el cementerio de Tunte, y surgió de la exclamación «¡un verdadero calvario!» de los lugareños, pues era el único existente en aquella época.

El acceso al pueblo del cortejo fúnebre dependía de la procedencia del difunto. Si se trataba de los pueblos de La Montaña, Hoya Grande, Hoya de Tunte, Taidía o Los Sitios, la entrada era por la parte Sur de la villa.

Calle Calvario (Google earth)
Si por el contrario, venían de Risco Blanco, Perera, La Culata, La Plata, Cercados de Araña y Ayacata lo hacían por el Norte. En ambos casos existía un pequeño descansillo y una cruz donde se depositaba el ataúd, lugar conocido popularmente como «descansadero de los muertos». En la isla nos econtramos distintos topónimos que de forma parecida hacen alusión a estas obligadas paradas que en ocasiones se debian a la necesidad de esperar a la llegada del cura para acompañar el entierro.

Descansadero de los muertos (psicothanatos-blogspot)
En este punto se esperaba la llegada del párroco, que lo hacia cinco o diez minutos antes del entierro portando los elementos del rito cristiano: la cruz, los cirios, el incienso y el agua bendecida. El cura recibía oficialmente al cortejo y juntos se trasladaban en procesión hasta la iglesia, donde se procedía al responso o rezo, y al posterior traslado al cementerio.

Localización (Guía Informativa de Tunte)

domingo, 22 de abril de 2012

CALVA, LA (ARUCAS)

Pequeño caserío situado junto a un pequeño barranquillo del mismo nombre, cuyo asentamiento poblacional se ha desarrollado en las márgenes del antiguo camino que va de Visvique a la Cuesta de La Arena, al pie del Lomo Jurgón. Sostiene el cronista Pablo Jesús Vélez que el topónimo debe su nombre a María Calva, matriarca de los Zuritas en el lejano siglo XVI.
Cantonera abandonada (Fedac)
Hace referencia a María Fernández Calva, mujer de Bartolomé Martín Zurita, hija del conquistador Alonso de Zorita el Viejo y de Catalina Fernández Calva, viuda de su primo Bartolomé Martín de Zorita . En la escritura de 1 de febrero de 1538 en la que su marido relaciona sus bienes, todos se sitúan en el municipio de Telde.

En el testamento realizado por ella el 8 de enero de 1552 no se da información de propiedades. De la distinta bibliografía consutada (CAMACHO Y PÉREZ GALDÓS, G.: "El cultivo de la caña de azúcar y la industria azucarera en Gran Canaria 1510-1535", Anuario de Estudios Atlánticos, nº 7, 1961; LOBO CABRERA, M. Y RIVERO SUÁREZ, B.: "Los primeros pobladores de Las Palmas de Gran Canaria", Anuario de Estudios Atlánticos, nº 37, 1991; NEGRÍN DELGADO, C.: "Cinco esculturas de origen Brabanzón conservadas en la isla de Gran Canaria", Anuario de Estudios Atlánticos, nº 39, 1993), no se infiere que tuviera propiedades en Arucas y las conocidas se sitúan en Telde.

Al margen de la conjetura que hace la fuente que no aporta bibliografía de referencia, entendemos que el origen del topónimo es debido a una antepasada de otra Maria Calva, del siglo XVII, que sustentaría además la vinculación que pudieran existir entre los topónimos Visvique de Arucas, próximo a este lugar, y Berbique de Agaete, al considerar que fue la familia de Maria Calva quien dio nombre al Visvique de Arucas, por rememoración o por alguna similitud arqueológica o paisajística con el de Agaete, tal cual contamos en dichas entradas.


Panorámica (Google earth)
Entedemos que el topónimo aruquense Visvique, colindante al de La Calva, pudo llegar a este lugar a través de la familia de María Calva de Quintana, hija de Mateo Quintana Carvajal y Beatriz García, y nos lo documenta el acceso a la titularidad de la mitad del Cortijo de Guayedra en Agaete cuya propiedad «... recae en el Capitán José Cabrejas Betancourt por vía de dote de su mujer y por compra hecha a doña   Beatriz García viuda de Mateo Quintana y a sus hijos: María Calva de Quintana, Fernando de Quintana y el Presbítero Diego Pinto ...». Dicha compra se realizó el 2 de mayo de 1664 ante Cristóbal Suárez de Medina, momento en el que vivía la repetida María Calva de Quintana, que pudo tomar el apellido de su madre u otro antepasado.

Veamos ahora la conexión de los dos topónimos Visvique. Tras distintos litigios por su titularidad, «...el valle de Guayedra quedó en poder del Capitán Cabrejas y de ello queda constancia en su testamento, dejando como bienes suyos «el Cortijo de Guayedra y el de Visvique ...», refieriéndose este último al lugar de Agaete contiguo a Guayedra (SUÁREZ GRIMÓN, V.: "La hacienda de Guayedra y el Heredamiento de Agaete ante la ocupación de realengos", Revista de Historia, nº 173, 1983), de donde se infiere la antigua igualdad léxica de ambos topónimos. La otra mitad del Cortijo de Guayedra perteneció a su tía Ana Guintana de Carvajal.

Sí está documentado que Pedro Cerón, Capitán General de las islas y Regidor, y su mujer Sofía de Santa Gadea, en escritura de 10 de julio de 1572, vinculan a su patronato un «Cercado de la Calva de cinco suertes y media con su albercón», de donde debe considerarse que realmente el topónimo lo toma de un ancestro de  la línea paterna de María Calva de Quintana, que pudiera ser Maria Calvo (sic) de Quintana Cabrera, hija de Gonzalo de Quintana nacido y bautizado en Gáldar y casado en Telde en 1541 con Catalina de Cabrera Zurita, hija de Blas Martín Zurita y Mencia Cabrera Bethencourt (EGEA MOLINA, E.: "Apellido Quintana en Canarias: una introducción sobre su origen e instauración", Genealogías canarias [geneacanaria-blogspot-com] 13-ago-2012), que parecen guardar relación sanguínea con los descendientes del conquistador Alonso de Zorita.


Localización (Espacios Naturales Gran Canaria)

CALMAS, PUERTOS DE LAS (ALDEA DE SAN NICOLÁS Y MOGÁN)

A partir del siglo XVIII las desembocaduras de los barrancos de Güygüy, El Asno (Tasartico), Tasarte, Veneguera, Mogán y Arguineguín constituían puntos de embarque por la importancia de la riqueza forestal y pecuaria de sus montes y cortijos, aunque con menos frecuencia, y atodos ellos se les llamaba "puerto" pues las embarciones podían fondear en sus proximidades y hacer la aguada, llenado de agua dulce los toneles.

Panorámica (fotosaereasdecanarias-com)
Portada del libro (Rincones del Atlántico)
El topónimo muy común en todas las islas hace referencia a los mares en calma. En 1764, el navegante escocés George Glas, médico y comerciante, que había llegado a Canarias por motivos prácticos relacionados con el comercio y la navegación, escribe el libro  publicado en Londres con una descripción de las islas, su historia, sus usos y costumbres.

En él incluye además distintas observaciones, y entre ellas menciona por primera vez el «efecto isla» refiriéndose a los mares en calma y a las fuertes y peligrosas turbulencias que se forman en sus límites, conocidas desde muy antiguo por los marineros que las llaman «los barbascos»

Estas particularidades tenían consecuencias sobre los veleros de entonces que, partiendo del puerto de Mogán hacia Santa Cruz de Tenerife, tenían primero que salir de las calmas, y luego superar los barbascos haciendo bordadas, derrotas que hace entre dos viradas el barco que navega, voltejeando para ganar o aventajar hacia barlovento, y siempre sin perder de vista la tierra.

El «efecto isla» genera, por la aceleración del flujo que forma remolinos ciclónicos y anticiclónicos, un fenómeno de gran importancia oceanográfica, porque influye en la formación y transporte de materia orgánica. Es decir, que provoca el bombeo de nutrientes y el ascenso de la clorofila profunda hacia la superficie, con la consiguiente mayor presencia de fuentes de producción primaria para la cadena trófica.

Vista aérea de la Cumbre central que protege de los vientos Alisios (Jarek Klimczak)
Se llama Mar de las Calmas a la franja marina junto a la costa que está protegida por las montañas de los vientos Alisios que actúan con fuerza desde el norte. Se extiende aproximadamente desde la Punta del Descojonado hacia el Sur, aunque su amplitud abarca desde la Punta de la Aldea hasta la desembocadura del Barranco de Tirajana, arco de costa suroeste 

Este efecto de los Mares en Calma se localiza en todas las islas del archipiélago con alto relieve, en el brazo de mar de separación entre islas, donde los vientos Alisios actúan con fuerza desde el norte, haciendo que el mar presente un aspecto rizado, a excepción de estas zonas de las Calmas al abrigo de las montañas.


Mar de las Calmas en Tasarte (coradi7)
Por este efecto, en las Calmas abundan muchas especies que atraen a gran cantidad de cetáceos, escuálidos y otros peces mayores, de lo que da cuenta el ilustrado Viera y Clavijo en su Diccionario de Historia Natural. Asimismo, se sabe de proyectos de pesca de cetáceos emprendidos en 1778, arponándose algunos en Arguineguín, aunque escaparon por la inexperiencia de los pescadores. En la actualidad la pesca de Altura en el mar de las Calmas se ha convertido en un gran atractivo turístico.




Cañas y carrete de competición (marcanario-com)

CALETA DE ARRIBA Ó DE SORIA (STA. MARIA DE GUÍA)

Situada entre la Punta de Jandía y la Punta de Guanarteme, después de dejar atrás al poniente la antigua Caleta de Abajo, es también denominada Caleta de Soria. Su ubicación en los límites de los municipios de Gáldar y Guía ha sido motivo de históricas disputas jurisdiccionales entre ambos municipios. Se desconoce el origen del topónimo alternativo Caleta de Soria que es recogido por la cartografía de Riviere (1740-43).

Cartografía del siglo XIX (Fedac)
El desarrollo del caserío como asentamiento poblacional no es antiguo; mucho más poblado que la Caleta de Abajo, fue primero "puerto" o fondeadero de embarque y abrigo de pescadores, pero en su espíritu acogedor ha ido recibiendo a otras gentes que la han elegido como lugar de residencia o de descanso.

Fue fondeadero natural para acoger a finales del siglo XV y principios del XVI las naves que embarcaban los productos agrícolas de la entonces Villa de Guía, por su mayor proximidad respecto del Puerto de Sardina, que pertenecía a la jurisdicción de Gáldar, y a la que no querían beneficiar por sus múltiples diferencias.

Caleta de Arriba (Ramón ruiz)
El origen del topónimo Caleta de Soria se debe  a la petición que  hace el 20 de febreo de 1550 el Alguacil de Gáldar Alonso de Soria, para que le fueran concedidas las tierras «en el termino de dicha villa do dizen el Bañadero un pedaço de tierra eb qye oyede aver seys fanegadas poco mas o menos dentro de las cuales tierras esta una cueva que dizen de los Muertos de tienpo de los Canarios las quales tierras tengo aprovechadas y çercadas y fecho un albercon y plantados en ellas seys mil sarmientos y otras arboledas y todavia se andan plantando de sarmientos hasta ser aacabada la dicha tierra» (RONQUILLO, M. Y AZNAR VALLEJO, E.: Repartimientos de Gran Canaria, Las Palmas de GC, 1998).

Fotografía: Nacho González Oramas
Los litigios jurisdiccionales entre Gáldar y Guía siguen aún estando vivos. En 1802 se estableció un deslinde oficial por el Corregidor Aguirre, igualando la demarcación civil a la religiosa, delimitación que no fue aceptada por ninguna de las dos partes.


Nª Sra. del Mar, procesión de 1960 (Fedac)
Este pleito afectaba a la costa, pues las ensenadas de El Río, Puerto Nuevo y Caleta de Soria, de naciente a poniente, se utilizaron para embarques de productos de Guía, pero el «alcalde de mar» de toda la comarca estaba en el puerto principal de Sardina, controlado por Gáldar, que reivindicaba la Caleta de Soria. En 1839 se crea la figura del «alcalde de mar» en Guía, pero colisiona con las atribuciones del mismo cargo de Sardina y la Diputación Provincial resuelve que pertenece a Guía.
 


Niño pescando con gueldera
(Col Agustín Melián miplayadelascanteras-com)
Las entonces mejores condiciones de la Caleta de Abajo y Sardina diluyen en algo el pleito con la implantación de las franquicias portuarias en 1852. En el siglos XX volvió a resurgir el pleito de delimitaciones, sin arreglo entre las partes, cuestión que puede volver a reproducirse en cualquier momento.

En la actualidad se tienen recuerdos de la llegada de los barquillos, cargados de pescado fresco, del que gran parte era vendido en la propia orilla, y el resto lo llevaban las mujeres en bañeras a la cabeza por el camino de Roque Prieto hasta La Atalaya y Guía, para venderlo allí.  Los pescadores lugareños hacían guelderas con aparejo para pescar gueldes y algunas fulas. Los barquillos se alejaban en busca de los erizos que se echaban como carnada en las nasas.
Localización (Espacios Naturales Gran Canaria)