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jueves, 1 de agosto de 2013

LORETO, PLAN DE (LAS PALMAS DE GC)

Topónimo con el que se conoce el territorio que siglos atrás fuera conocido como cercado de Loreto, que perteneciera al presbítero Jerónimo del Río Loreto.

Se trataba de un amplio espacio rústico de algo más de siete fanegadas, enmarcado por las montañas de Socorro y de Tafira al naciente, y el lugar de El Piquillo sobre la fuerte rampa de la amplia cuenca del barranco de Guiniguada, atravesado por la Autovía Las Palmas-Tafira (GC-110).

El entorno de Loreto que atraviesa la aurtovía (Google earth)
El topónimo El Piquillo es así conocido por los lugareños al tratarse de una pequeña elevación rematada con un promontorio rocoso o afloramiento volcánico en la actualidad edificado, desde donde se domina todo el cauce medio del barranco Guiniguada junto al que se encuentra el Jardín Canario Viera y Clavijo, panorámica que en la actualidad puede contemplarse desde las terrazas del restaurante del Jardín Canario edificado salvaguardando la arquitectura tradicional canaria.
Cruz de Loreto (crucesgc.blogspot-com)

Desde el lugar de El Piquillo se iniciaba el antiguo sendero que desciende al Molino de Maipez y que pasa muy cerca de la colina de Loreto donde está situada la cruz homónima (SANCHO SORIANO, M.: "Cruz de Loreto", crucesgc.blogspot, 28-jul-2013).

Las más antiguas referencias documentales del antropónimo Loreto las tenemos cuando Dominga Gómez viuda de Sebastián Loreto, en escritura de 6 de febrero de 1703, constituye un patronato con los mucho "censos" (ingresos) por las ventas de sus tierras a rédito anual perpetuo siguiendo los cánones del Antiguo Régimen. De las ventas realizadas en 1648 percibía 6 reales de Beatriz Dantos, 8 de Luisa Sarmiento y 15 de Marcial Rodríguez; De las realizadas en 1650 recibía 10 reales de Miguel González y 15 Gonzalo Hernández en 1650. Nombra sucesor a su nieto Jerónimo del Rio Loreto, y se extinguiera la descendencia de éste y sus hermanos el Síndico del convento de San Francisco de Las Palmas.

Ese mismo día 6 de febrero de 1703 instituye igualmente en escritura otro patronato su hija Mariana Loreto, viuda del Capitán Juan del Río Castillo, con otros censos de las veinte fanegas de tierras vendidas en 1698 por mitad a Vicente Navarro y a Luis Martel Vega, por las que recibe 35 reales  y 25 reales respectivamente. Igualmente como su madre nombra sucesor a su hijo Jerónimo del Río Loreto, entonces clérigo de menores, y a su fallecimiento, sus otros hijos con preferencia del mayor al menor y del varón a la hembra.

El presbítero Jerónimo del Río Loreto,  que alcanzó los cargos de Arcediano de Fuerteventura, Dignidad de la Catedral y Juez Subdelegado de la Santa Cruzada, cuando toma la posesión de los patronatos de su abuela y de su madre con multitud de censos por la venta a perpetuidad de las tierras, vuelve a recuperar las propiedades por medio del sistema de pago aplazado.

Así el 24 de octubre de 1760 en su testamento vincula las propiedades recuperadas entre las que se cuentan siete rústicas de 249 fanegadas y varias casas compradas, patrimonio que alcanza un valor de 663.463 reales de vellón (SUÁREZ GRIMÓN, V.J.: La propiedad pública, vinculada y eclesiástica en Gran Canaria, en la crisis del antiguo régimen, Las Palmas de GC, 1987).



Subida a El Piquillo (Google earth)
Las casas compradas se localizan en calles y lugares que por su sola mención nos describen buena parte de la Ciudad del siglo XVIII: casas en la calle que sube del Peso de la Harina para San Roque, en la calle Cano, en la plaza de las monjas Bernardas, en la calle Diablito, y otra de alto y bajo en la calle Espíritu Santo; varias en el Terrero, una en la calle que sube a San Justo, otra junto a la muralla del Barranco, y, otra más junto al puente y muralla del Barranco; y por último la casa en la calle de Triana con diferentes viviendas que denominan "El Mesón Pintado".

Interesante es también la descripción de las fincas rústicas que nos dan señas de topónimos próximos al de Loreto, en dirección suroeste hacia el Monte Lentiscal, conocidos en la actualidad como son Vuelta de los Ríos, Finca de los Ríos y La Caldereta, y que nos aproxima a la gran extensión de los bienes vinculados por el presbítero, así como sus aprovechamientos:

«Hacienda plantada de malvasía y vidueño con casas, cuevas y lagar en la Calzada, con 20 días de agua de la que corre hacia el mar. Hacienda de viña inmediata denominada "Caldereta". Cercados de tierra labradía en Tafira. Cortijo de tierra labradía y pastos de ganados con una parte de agua, casa y homo de teja. Cortijo de tierra en los Barrancos. Suerte de tierra con un día y 1 noche de agua del Hto de la Meseta Alta, en Cueva Grande (San Mateo )» (IBÍDEM).



Detalle de panorámica de 1976  (Günter Kunkel - Fedac)
Nombra sucesor a su hermano Manuel del Río Loreto y su descendencia, con preferencia del varón a la hembra y del mayor al menor, estableciendo que si se agostasen se fundaría una capellanía colativa con misa diaria en la ermita de las casas de la Calzada dedicada a San Jerónimo y Ntra. Sra. de la Candelaria. La obligación impuesta a los sucesores de usar y firmar con el apellido "Río" marcará de alguna forma la notoriedad de los mencionados topónimos Vuelta y Finca de los Ríos.

Llama la atención su exigencia de usar y firmar con el apellido Río, cuando el arcediano en sede catedralicia ha usado su segundo apellido, según se desprende del la reseña del Cabildo del viernes 3 septiembre de 1723 "después de Spiritual": «En este cabildo llamado ante diem para nombrar los señores que han de ir de diputación a la festividad de la Natividad de Nuestra Señora a Teror, se acordó por todo el cabildo que se nombra a los señores Thomás Moro, y a los señores Juan Carvajal y Gerónimo Loreto» y otras citas siguientes (DE LA TORRE, L.: "Documentos sobre la música en la Catedral de Las Palmas. 1721-1740", El Museo Canario, nº 57, 2002).



Las propiedades del vínculo de Jerónimo del Rio Loreto
(Espacios Naturales de Gran Canaria)
Respecto a la mención de la ermita y su advocación que se hace en su testamentaría, realizada como hemos dicho en 1760, añadir que en el diario de 1764 de la visita del Corregidor Nicolás de La Santa Ariza y Castilla para la realización de los deslindes, por la crónica del Padre Acevedo de su visita al lugar de La Vega se infiere su buen estado de conservación:

«Presentado, con el motivo de selebrar y authorisar la fiesta que a el otro día se consagrava a la Señora en la hermita sita y contigua a la casa y hazienda de los Señores el Licdo. don Manuel del Río y Loreto y su mujer doña Nicolasa Padilla, ya difunta, padres del mencionado Rvdo. P. Presentado, el qual convidó a el Sr. Corregidor y comitiva para que le acompañaran el día siguiente por la mañana, no sólo a la fiesta, si también al mediodía a la mesa, en la que se selebró un magnífico convite, a el que concurrieron también el Theniente de Cura y ministros de la parroquia, el que cantó la misa en dicha hermita, la que está dotada con la fiesta por los predesesores de aquella Casa y hazienda. Entonado por el Sacristán mayor, acavado el convite, un responso solemne en conmemoración de las ánimas  de los difuntos fundadores» (DE LA ROSA OLIVERA, L.: "Diario de la visita del corregidor La Santa Ariza y Castilla a la isla de Gran Canaria en l764, por el P. Acevedo", Documentos, El Museo Canario, nº 17-18, 1956-1957).

El mencionado reverendo presentado es fray Antonio del Río, hijo de Manuel del Río y Loreto. No debemos confundir las referencias de esta desaparecida ermita, con otra relativamente cerca ubicada en los topónimos actuales de La Capellanía y La Concepción, que fue construida por el Licenciado y Capellán de Santa María en la Catedral, Matías Lorenzo Fernández según hemos informado en la entrada del topónimo de La Calzada a este Blog.


Será en la escritura de división del vínculo del presbítero Jerónimo del Rio Loreto realizada el 17 de noviembre de 1853 cuando se consolide el topónimo de Loreto, al mencionarse explícitamente la finca de 7 fanegadas, 6 celemines y 1 cuartillo descrita como «Cercado denominado Loreto, en Tafira, con una casa de alto y bajo, y medio día y un surco de agua del Heredamiento de Tafira», siendo los poseedores a medias los descendientes de su hermano Juan del Río Castillo y Manuel del Río León.

Vegetación del entorno (Google earth)
El añadido al antiguo topónimo hasta llegar al actual Plan de Loreto se debe a las normas urbanísticas del municipio cuando comienza a definirse el espacio protegido de Tafira al inicio de la segunda mitad del pasado siglo XX, proyectándose en las vertiente de la montaña de Socorro y montaña de Tafira la construcción de algunas viviendas unifamiliares en las tierras cuyos últimos propietarios habían sido las familias Cambreleng y Pavillard, con proyectos realizados por el reconocido arquitecto Miguel Martín Fernández de la Torre que en la primera mitad del siglo había diseñado el barrio de Ciudad Jardín en Las Palmas de G.C.

Las protecciones desde su nacimiento fueron muy restrictivas en cuanto a la calificación del suelo, la definición del tamaño mínimo de las parcelas y su volumen de edificabilidad, así como el respeto a la vegetación y bienes etnográficos preexistentes, trasladándose su espíritu a los sucesivos planes de ordenación del municipio, regulaciones que han motivado sentencias judiciales del Tribunal Supremo para consagrar el grado de protección.


Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)

lunes, 10 de septiembre de 2012

TEGUESTE (GÁLDAR)


Actualización: 2013/12/20
Topónimo aborigen con el que se conoce un pequeño caserío situado en la carretera que sube de Las Cruces - Caideros (GC-220), después de pasar la entrada al caserío de Hoya de Pineda.
Vista (Google earth)
Es topónimo también existente en la isla de Tenerife y puede tener su origen en el paralelismo toponímico entre el África bereber y las islas. 

Ya decía Abreu y Galindo: «… También me da a entender hayan venido de África, ver los muchos vocablos en que se encuentran los naturales destas islas con las tres naciones que había en aquellas partes africanas, que son berberiscos y azanegues y alárabes. Porque Telde, que es la más antigua población de esta isla de Canaria, y Gomera, y Orotava en Tenerife, son nombres que se hallan en el reino de Fez y Benamarín.

Y en Cabo de Aguer están unas huertas que llaman las huertas de Telde, no muchas leguas distante de la ciudad de Tegaste, donde estuvo enterrado el cuerpo de San Agustín, en la cual huerta está una casa pequeña con una puerta chica entre unas tapias, y unas parras de almuñécar junto a una acequia de agua, con que se riegan muchas huertas. Y dentro de esta casa, en la pared, está el sepulcro de San Agustín, en la pared frontera como se entra por la puerta, con una losa negra encima. La cual capilla, aunque es poseída de infieles, es por ellos venerada para conservarla y no deshacerla, según me informé de personas que tratan en aquellas partes.
Molino (Fedac)
Esta ciudad de Tegaste está tres leguas del mar y cercana a Fuerteventura y junto al monte Atlas, en las faldas dél, por donde descienden muchos ríos y arroyos. Hay unos pueblos que llaman de este nombre Telde, de manera que en los nombres propios parece conformar y en muchos vocablos apelativos, los de estas islas con los africanos. Y dello se puede colegir qué nación haya venido a cada isla, conforme a la consonancia de los vocablos…» (Historia de la conquista de las siete islas de Canaria, Sta. Cruz de Tenerife, 1977)

En la actualidad se considera certera esta hipótesis de Abreu y Galindo en cuanto al paralelismo entre los topónimos bereberes y los aborígenes canarios, si bien contiene algunos leves errores. El mencionado Cabo de Aguer, no es otra que la antigua Santa Cruz de Aguer hoy llamada Agadir, ciudad de Marruecos. Pero en cuanto al topónimo marroquí, el allí localizado es Tigueust, y el más próximo a la voz que incluye es Tagaste que se localiza en Argelia lugar de nacimiento de San Agustín de Hipona.


Lavadero (Fedac)

Aclarado este particular, aunque el pequeño caserío está conformado en la actualidad de un moderno asentamiento, contanddo con algunas cuevas de usos habitacionales o para usos agro-ganaderos, se encuentra en el entorno de un asentamiento troglodita aborigen del que han quedado las casas-cueva de La Degollada junto a la Hoya de Pineda, con muchos aprovechamientos posteriores vinculados al centro locero, así como el conjunto de cuevas del Tirior, ya en la jurisdicción de Sta. Maria de Guía, pues el barranco de la Boticaria o del Alguacilejo es la divisoria entre ambos municipios.

El caserío de Tegueste se asienta en la ladera meridional del Coronado, pequeño edificio volcánico separado de El Cabezo de la Montaña de Guía precisamente por La Degollada originada por la caldereta de la Hoya de Pineda, todos en un sustrato volcánico donde los tubos o cuevas fueron aprovechados en el pasado. Es válido suponer que este caserío correspondió igualmente a un asentamiento aborigen.
Vista desde el Coronado de La Degollada y El Cabezo (Samuel Mederos)
« A su regreso de Colombia, durante la guerra civil, en 1938, Pérez de Barradas pasó tres meses en Las Palmas y estudió directamente las colecciones de El Museo Canario.

Resultado de este trabajo es la publicación de su Estado actual de las investigaciones prehistóricas sobe Canarias (1939), que aunque breve, es el primer intento serio de un prehistoriador español por acercarse al mundo arqueológico canario. Las consideraciones más importantes apuntadas por Pérez de Barradas podrían resumirse así: (...) 6. La segunda oleada correspondería a la «cultura de las cuevas», procedente del norte de Africa, y serían los proto-guanches. El arribo de estas gentes lo sitúa alrededor del 2.500 a. de J. C.» (MARTIN DE GUZMÁN, C.: Las culturas prehistóricas de Gran Canaria, Madrid, 1984).

Las últimas investigaciones sobre el topónimo Tegueste, y en particular el grancanario, nos hablan de su posible origen en la deportación de guanches de Tenerife a Gran Canaria, información que nos aproxima a la mejor comprensión de del topónimo en sus varias localizaciones en las islas de Tenerife, El Hierro, Gran Canaria, Lanzarote y La Gomera, así como su amplia distribución en la geografía bereber del Norte de África:


«...El caso de Gran Canaria es muy interesante, ya que podemos constatar cómo se conserva la forma argelina o marroquí de TAGASTE, así como la forma tinerfeña de TEGUESTE. En el municipio de Tejeda podemos encontrar las denominaciones de “Umbría de Tagaste”, haciendo alusión a la orientación del terreno y también en la misma zona como “Hoya de Tagaste”, se encuentran a 750 m. de altitud y respondería al topónimo más antiguo. Frente a éstos, en Gran Canaria existe otro topónimo, de similitud morfológica idéntica a nuestro, Tegueste, que se encuentra en Gáldar, muy cerca de la Hoya de Pineda.


Alpendre-cueva (Fedac)
Para el historiador Gabriel Betancor Quintana, el topónimo Tegueste, así como otro muy próximo, la Hoya del Guanche, están vinculados a la presencia de guanches de Tenerife, deportados y obligados a asentarse en ese territorio. Así Gabriel Betancor comenta: “(…) de los avecindados en Gran Canaria: Francisco de Güimar, Sebastián de Anaga, Juan de Tegueste….; o de las familias de canarios Juan Grande, Luis Pérez, Pedro González, Juan Maninidra, Francisco de Santiago (…) en sus asentamientos de Guayadeque, Tasautejo, Hoya de Pineda, Agaete, Guayedra, Tamagada, Lugarejos(….).

Por tanto debemos situar el origen del topónimo a finales del s. XV.  En el Archivo Histórico Provincial de Las Palmas, nos encontramos en la documentación existente, a Juan de Tegueste, como vecino de Gáldar en 1526 y ante el escribano Alonso San Clemente, otorgando junto a otros vecinos poder a Francisco Jaimez, para que se oponga a la segregación del lugar de Santa María de Guía de la villa de Gáldar » (RODRÍGUEZ RODRÍGUEZ, T.: El topónimo Tegueste y sus distintas acepciones, Inédito, 2012).


Puede avalar esta teoría la comparecencia de Juan de Tegueste en el poder otorgado el 24 de octubre de 1526 por una amplia nómina de vecinos significativos de Gáldar, a favor del escribano y convecino Francisco Jaimez de Sotomayor, para pleitear contra la decisión del gobernador de la isla Martín Fernández de Cerón de crear una alcaldía real para el lugar de Guía que hasta ese momento se integraba en Gáldar. Sobre este vecino se dice «Juan de Tegueste, guanche de Tenerife, donde hubo un don Juan de Tegueste, probable pariente del Mencey de dicha localidad. Pudiera ser el mismo» (BONNET SUÁREZ, S.: "La villa de Gáldar en 1526", El Museo Canario, nº 73, 1960).



Localización (Espacios Naturales de Gran Canaria)